La Paz, 25 de junio (Urgentebo).- Diez años después de un incendio que acabó con la vida de seis compatriotas, la justicia argentina condenó a 13 años de cárcel a dos encargados de un taller textil clandestino en el que los connacionales trabajaban en condiciones de servidumbre.
El Defensor del Pueblo, David Tezanos Pinto, aplaudió la decisión de la justicia argentina que condena a 13 años de cárcel a los responsables de la muerte de seis bolivianos.
El Tribunal Oral Criminal número 5 de Buenos Aires condenó a Juan Manuel Correa y Luis Sillerico Condori por su responsabilidad en las seis muertes y por reducción a la servidumbre de sus trabajadores. El Tribunal ordenó también investigar en material penal, a Jaime Geiler y Daniel Fischberg, propietarios de las marcas de ropa masculina para las que trabajaba el taller, y a los policías y funcionarios que pudieron tener responsabilidad en el suceso.
En marzo de 2006, Wilfredo Quispe (15 años), Elías Carbajal (10), Luis Quispe y Rodrigo Quispe (ambos de 4 años), Harry Rodríguez (3) y la joven de 25 años Juana Vilca, que estaba embarazada, murieron en el incendio de un taller del barrio porteño de Caballito, donde trabajaban y vivían unas 60 personas en condiciones serviles.
Tezanos destacó la sentencia contra dos ciudadanos, un boliviano y otro argentino, quienes en su calidad de capataces de la factoría fueron acusados de los delitos de reducción a servidumbre en concurso con estrago culposo seguido de muerte.
El Defensor solicitó a las autoridades bolivianas a incrementar esfuerzos para llevar adelante una lucha efectiva contra los delitos de trata y tráfico con fines de explotación laboral en talleres y negocios similares como aquel donde ocurrió el siniestro, así como establecer los mecanismos eficaces de coordinación entre Estados que permitan su protección y, en su caso, su repatriación.