Diciembre 16, 2024 -H-

Cochabamba está azotada por la sequía y la escasez de agua

Cochabamba sufre por la falta de agua y la sequía que azota a 30 de sus 47 municipios. Las autoridades señalan que el plan para la dotación de agua demorará, al menos, un año y medio en concretarse.


Jueves 1 de Septiembre de 2016, 11:15am






-

La Paz, 1 de septiembre (Revista Oxígeno).- Cochabamba vive una de las peores crisis de sus últimos 20 años. La escasez de agua y la sequía ponen en jaque a 30 de los 47 municipios de este departamento. Por eso la Gobernación de ese departamento emitió, en junio, la Ley de Desastre Departamental, que trata de apaciguar, al menos en parte, la dura realidad que vive la Llajta.

Los municipios más afectados están en la zona Andina, Cono Sur y Valle Alto, donde fueron afectadas 332 comunidades y 8.706 hectáreas de tomate, papa, maíz, trigo, arveja y otros productos, según el informe del asambleísta Departamental por la provincia Campero, Edilberto Soto.

El municipio que mayores problemas tuvo por este efecto fue Mizque, con 74 comunidades, 2.453 familias afectadas y 1.880 hectáreas dañadas.

A éste le sigue el municipio de Anzaldo con 68 comunidades y 1.470 hectáreas de cultivos. Tapacarí con 57 comunidades y 915 hectáreas. Totora con 44 comunidades y 1.670 hectáreas.

La secretaria de la Madre Tierra de la Gobernación, Soledad Delgadillo, señaló que el plan de mitigación, que está contemplado dentro de la declaratoria de desastre y está articulado con los ministerios de Medio Ambiente y Agua, Desarrollo Rural y Tierras y el Viceministerio de Defensa Civil, los tres entes estatales coadyuvan con los municipios y comunidades afectadas.

“El plan para mitigar la sequía considera, por ejemplo, la construcción de estanques de hormigón armado para almacenar el agua que proviene de algunas vertientes. Se dotará estanques de plástico, filtros de agua y alimentos a las comunidades más afectadas. También se realizará la perforación de pozos (de agua)”, explicó Delgadillo.

La situación en el área metropolitana

Al igual que ahora, en 1992 la ciudad de Cochabamba también sufría por la escasez de agua. Entonces, la población disponía de una oferta de agua del Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Semapa) de 400 litros por segundo. Aunque hoy se tienen 900, el déficit sigue siendo significativo por la falta de lluvias y las fugas en la red. 

Desde este año, los municipios del área metropolitana, Cercado, Cochabamba, Vinto, Sipe Sipe, Sacaba, Tiquipaya y Colcapirhua, afrontan un racionamiento 50% mayor que en los últimos 20 años.

 “El problema es que hemos tenido una temporada de lluvias muy baja en comparación a las expectativas que nosotros teníamos, obviamente eso ha generado una disminución en los volúmenes disponibles de agua que tenemos y se ha incrementado nuestro déficit. Este año sin duda es mucho más duro”, explicó el gerente de Semapa, Gamal Serhan.

Y es que a pesar de que cerca de un 90% de los habitantes de Cochabamba cuentan con tanques de almacenamiento de agua, el racionamiento y la baja presión impide que sean abastecidos a cabalidad, por lo que recurren a la compra de agua de cisternas, cuya calidad no es garantizada.

div class="media media-element-container media-default">

Perjuicios en la industria

Un informe de la Cámara de Industria y Comercio de Cochabamba, devela que la escasez de agua está golpeando a varias empresas. Los rubros más afectados son los de  alimentos, bebidas, cuero, papel, plásticos, químicos, textiles y vidrios, que demandan el 53% de agua.

Los sistemas de auto abastecimiento en las empresas redujeron su capacidad de recarga en un 15% en promedio, por efecto de la baja precipitación pluvial.

Esta reducción en la producción de agua de sus pozos, debe ser compensado con la compra del líquido elemento, por medio de cisternas,  que en promedio cobran 15 bolivianos por cada metro cúbico. Una cisterna de 15.000 litros, tiene un costo de 225 bolivianos.

El informe explica, como ejemplo, que en una empresa de procesamiento de papel, el déficit de agua alcanza a 300 metros cúbicos cada mes; por lo tanto, se debe invertir 4.500 bolivianos mensuales. Y el costo adicional en 6 meses es de 27.000 bolivianos.

En cambio, en una empresa de elaboración de bebidas, el déficit de agua alcanza a 1.650 metros cúbicos por mes. La compra adicional le conlleva un gasto extra de 24.750 bolivianos por mes y 148.500 en 6 meses.

El Proyecto Misicuni

En 1953, se habló por primera vez del proyecto Misicuni, que nació como una opción para generar energía eléctrica.

Sin embargo, la priorización de otros planes, la falta de planificación, la falta de recursos económicos, inconvenientes geológicos y la corrupción, entre otros, son algunos de los factores que incidieron en su constante postergación.

Pese a ello, en 1989 se decidió ejecutar la obra por etapas. Una primera fase con la construcción del túnel de trasvase; un segundo periodo con la edificación de la presa, la planta de tratamiento y la hidroeléctrica; y una tercera etapa, con la perforación de dos corredores para los ríos Viscachas y Putucuni.

El presidente de la empresa Miscuni, Jorge Alavarado, explicó que el proyecto está en la recta final, pero los cochabambinos deberán esperar por lo menos dos años más para concretar el proyecto.

.