La Paz, 17 de marzo (Lía Vega. Urgentebo).- La extrema pobreza mató a Eva, una niña 12 años que vivía en un alejado barrio de la ciudad de El Alto. Enferma de una epilepsia cada vez más aguda, la pequeña murió finalmente por desnutrición crónica, ante la impotencia de sus padres y hermanos, cuyo mundo –una habitación de 4x4 metros- sólo lucía miseria y falta de recursos.
El drama de la familia que vivía en el barrio Junt’uma (Agua Caliente) empeoró hace tres meses cuando los padres –afectados por una enfermedad- perdieron las fuerzas para trabajar y todos quedaron en manos del hermano mayor, un muchacho de 19 años que hacía de ayudante de albañil. Durante el día, la madre, también enferma, batallaba por asegurarles el desayuno sin la certeza de que a la noche vayan a cenar.
Con pocos alimentos, sin posibilidad de acceder a medicamentos, Eva y sus hermanos habían dejado la escuela. La falta de dinero era la razón de aquello.
Un joven jefe de hogar
Agobiado por la presión de mantener a sus papás y hermanos, el muchacho llevaba lo que podía comprar, pero el mundo se vino abajo cuando terminó su contrato y nadie estaba interesado en darle una “pega”.
Mientras tanto, en casa, la situación de Eva se agudizaba. Sus hermanos se habían acostumbrado a los ataques de epilepsia, a la pérdida de conocimiento y desde la anterior semana hacían lo posible por alimentarla. Pero era imposible. El hecho ocurría en plena ciudad.
“Mi hermanita, la que ha fallecido, le daba convulsiones seguidas, al día ocho veces y la última semana de su vida, perdió el apetito, yo a la fuerza le hacía comer, ha perdido fuerzas, ha decaído, posteriormente entró a una desnutrición severa”, contó el muchacho.
No pudieron llevarla a un médico para tratarla, por la falta de recursos económicos. “Yo estuve trabajando de albañil en dos construcciones, luego de terminar esto, fui a buscar otros trabajos, pero no encontré, porque las personas decían que no confiaban en mí, no sé por qué”, se preguntaba el muchacho, al momento de recoger el cuerpo de su hermana de la morgue del Hospital de Clínicas en La Paz.
Lourdes, mamá de la pequeña que perdió la vida, dijo que Eva, antes era normal, no padecía de epilepsia. “Ella era normal, tuvo esa enfermedad luego de que volvió del colegio porque sus compañeras le hicieron caer”.
A los cuatros hermanos menores de Eva se les diagnostico desnutrición moderada y anemia, por ello fueron trasladados al hogar 24 horas, donde son atendidos para que puedan recuperar su estado de salud.
Mientras el papá continúa internado en el hospital japonés del El Alto, porque aún se encuentra débil por no haber recibido alimentación.
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Los papas y una hermana de Eva (foto Nayma Enriquez)
A la mamá de Eva se le diagnosticó un tumor, lesiones dérmicas y otras enfermedades. Fue internada este jueves, pero la mañana de este viernes dejó el hospital para buscar trabajo y ayudar en el trámite del entierro de la hija.
“Pago 200 bolivianos de alquiler. No gasto agua porque no lavo mucho. Mi familia comía poco, mis hijos desayunaban. Cuando había comida podíamos cenar. Ahora yo quiero volver a vender, quiero trabajar”, expresó.
La familia actualmente vive en alquiler, por ello se encuentran preocupados debido a que la dueña de casa, piensa vender el inmueble. “La dueña de la casa lo va vender, ya nos informaron de eso, yo solo quisiera que nos ayuden a encontrar un cuarto, aunque sea de cuidador y también colaborarnos con alimentos, víveres. Mi hermano que me sigue, estaba estudiando, pero por falta de dinero ya no fueron al colegio”, dijo el responsable de la familia.
El director Nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) Coronel Walter Villamor, dijo que investigarán el caso a pesar de que se determinar que la niña falleció por desnutrición. “Se hizo la investigación correspondiente y se conoce que la fallecida, tenía problemas médicos, hace unos cuatro años sufría de epilepsia, era una complejidad que puede ser la causa de la muerte”.
La alcaldesa Soledad Chapetón de acuerdo al informe que recibió de la familia indicó que los menores no contaban con el certificado de nacimiento. “Me acaba de informar mi asistente, de que hemos recibido un informe desde el servicio legal integral de este caso en particular y los irresponsabilidad por parte de los progenitores”, manifestó la autoridad edil.
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