Manuel Alejandro es un atigrado de corazón. En las canchas de fútbol de salón defiende con garra el arco de su equipo. Y con esa determinación, Manu, que es el actual arquero de Proyecto Latin, se ha convertido en uno de los porteros más importantes del país en esta disciplina.

La composición del equipo de jugadores puede variar, según el rival con el que se va a jugar, pero el arquero generalmente es una pieza que requiere y genera confianza. “Es que el portero es como un héroe”, describe Manuel Alejandro Vasquez Berazain.

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Proyecto Latin es una institución deportiva paceña, actualmente es el bicampeón de la Liga boliviana de Futsal y en ese equipo, Manu es un valor destacado desde los 17 años. Pero, ¿dónde radica la pasión de él por esta disciplina? Todo comenzó a sus siete años, el deseo de jugar con un balón lo llevó incluso a romper vidrios; la mamá de Vásquez le apoyó siempre y le inscribió en la escuela de futbol de The Strongest, en la calle Yungas. “Hasta ese entonces era una cancha de tierra”, narra el arquero y sonríe añorando sus inicios.

“Desde ese entonces la tenía clara, sabía que iba a ser arquero, me encantaba vestirme como héroe”, relata Manu. Es hincha del Tigre y cuenta que ir a los partidos de la División profesional incrementó su amor por el futbol, mientras cumplía sus sueños.

En un principio, su prioridad fue el fútbol, “jugar en el césped me encantaba”, relata. Luego, a los ocho años con la guía del profesor Victor Quino, empezó a jugar futbol de salón y muy rápido llegó a  la selección paceña. “La verdad para mí es algo sorpresivo, porque yo era arquero suplente y pasé a ser titular, recibí mi primer trofeo como mejor arquero del campeonato de ese Nacional”.

El camino de Manu se hizo próspero. A sus diez años fue parte de la selección paceña para un tornero en la ciudad de Oruro. Desde entonces, integró nueve selecciones de futsal. “Gracias a Dios puedo decir con todo el entrenamiento, que llegué a ser dos veces mejor arquero de los nacionales de estos campeonatos”.

Tres hitos marcaron su vida en el futsal. Uno se remonta al 2013, cuando se jugaba el campeonato en el Nacional de Yacuiba, La Paz se consagró campeón; el año posterior logró el título de bicampeón y el 2020 llegó a cuartos de final.

“Fue una experiencia inolvidable, ya que era la última selección juvenil que tuve”. Además de esta linda experiencia, Vasquez cuidó la portería de Wolf Sports, Illimani Zebol y hoy se viste como héroe para el club Proyecto Latin. “Empecé como tercero y cuarto arquero, poco a poco se fue dando la oportunidad”, dice Manu.

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El campo financiero y el del futsal apasionan Manuel Vasquez. Este año egresó en la Universidad Católica Boliviana como Ingeniero Financiero, y con alegría cuenta que fue pasante en varias instituciones financieras, entre ellas, la Boliviana Ciacruz.

Hoy es asistente comercial en el Banco Ecofuturo. Ahora Manu dice que seguirá trabajando para ser excelente portero y profesional en finanzas.

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