12 de abril (Urgente.bo).- La deserción escolar tiene avances en Bolivia, sin embargo, aún afronta desafíos importantes. Desde World Vision, Javier Alvarez, responsable Programa de Desarrollo de Área (PDA) Unidos Para Vivir Mejor, afirma que los niños y adolescentes varones son los más abandonan la escuela para sostener el hogar.
Si bien la deserción escolar comienza a temprana edad, la fundación identificó que los adolescentes varones son los que más abandonan la escuela por múltiples factores tanto en el área rural como en el área urbana.
“Hay muchos desafíos educativos para la niñez, hemos visto de cerca la realidad de niños y niñas del país durante años, uno de los desafíos es el acceso a la educación en zonas rurales, pero también en las zonas urbanas”, expresó Alvarez a Urgente.bo.
La deserción escolar imposibilita que los infantes y adolescentes tengan una educación regular y permanente.
Las causas son múltiples
Según el experto, las causas son múltiples, pero radican en la falta de economía en los hogares. Los que abandonan la escuela tienen más características de las mencionadas: en ocasiones son los hijos mayores, quienes vienen de familias monoparentales, entre otras.
Otra de las causas principales, es el trabajo infantil. “Podríamos decir que los adolescentes deben dejar la escuela por temas extraescolares, las causas están relacionadas con la situación socioeconómica de las familias”.
En las zonas rurales aún las distancias de los hogares y espacios educativos son amplias, esto quiere decir que los estudiantes deben caminar horas de horas.
También el abandono a las escuelas nace dentro de las unidades educativas por la violencia pedagógica que en ocasiones se ejercen en contra de los estudiantes.
div class="media media-element-container media-default">Las consecuencias son pagadas por el Estado
El hecho de que los adolescentes no concluyan su ciclo escolar tiene un precio alto, posteriormente. El responsable del área califica estas consecuencias como “complejas” las cuales tienen costos socioeconómicos altos.
La deserción escolar no solo afecta al individuo como tal, sino también afecta al desarrollo económico del país.
“El abandono tiene un costo social alto para el Estado, tiene que ver con la imposibilidad que los niños accedan a los espacios educativos”, dijo Alvarez.
Para el encargado, “se debe trabajar en fortalecer las familias para que garanticen la permanencia en una escuela de sus hijos”. Y desde World Vision trabajan con más énfasis en las zonas rurales, atendiendo el llamado de las comunidades.
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