8 de julio (Urgente.bo).- Hoy, el Museo Casa de Murillo, ubicada en la conocida calle Jaén de La Paz, conserva un espacio característico de Alto Perú y parte de la historia de Bolivia, pero según el historiador Pablo Michel, el héroe de 1809 jamás tuvo una casa en vida y no es verdad que haya vivido ahí.
“No es verdad que Murillo haya vivido en la casa que hoy se llama Casa de Murillo, pues él quedó en la ruina tras perder en un juicio todas sus propiedades por ser acusado de "hijo sacrílego" (…) Murillo jamás tuvo en vida una casa como nos lo muestran hoy en la calle Jaén”, explica.
Cuando Murillo fue muerto en 1.810 solamente pudo dejar a su hija Tomasa un anillo y unas cuantas monedas de oro, que tuvo que empeñar para poder comer. La conocida calle Jaén no tuvo ese nombre hasta 1909, año del primer centenario de la revolución de La Paz, relata el historiador.
“Al cumplirse el primer centenario de la revolución paceña en 1909 y el cuarto centenario de la fundación de La Paz se recreó esta "calle colonial" que para finales del siglo XIX era simplemente un muladar que chocaba y terminaba en un muro (cruzando la calle Sucre) donde hoy se encuentra un busto que se lo presenta como Apolinar Jaen, pero que en realidad fue el primer busto del mismísimo Pedro Domingo Murillo y que a la llegada de su gran monumento desde Italia en 1909 ubicado hoy en la plaza de armas, este busto "perdió" los bigotes para "volverse" Jaen”, explica Michel.
Según investigaciones, el verdadero dueño de la casa era José Ramón de Loayza, una de las más apreciadas amistades del personaje paceño y quien le habría dado refugio, mientras que Murillo residía detrás de la iglesia de Santo Domingo.
Actualmente la casa de Murillo se halla como un museo dedicado al patriota Pedro Domingo Murillo y a la revolución de julio de 1809. Es una vivienda de principios del siglo XIX.
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