30 de julio (Urgente.bo).- Trabajadoras sexuales piden que se les permita trabajar implementando las medidas de bioseguridad y protocolos que fueron presentados a las autoridades en salud.
Lily Cortez, representante de ese grupo social, contó que por las restricciones a su labor, muchas de las trabajadoras sexuales ponen en riesgo sus vidas acudiendo a alojamientos que no son higiénicas para continuar con su labor sexual y así poder sustentar a su familia.
“Queremos volver a trabajar, ya el protocolo ha pasado de la epidemióloga al COED, ha pasado al Ministerio de Salud. Queremos trabajar, las compañeras están en las calles, arriesgando sus vidas llevando presas, son prontuariadas como delincuentes, sin ninguna bioseguridad, esos alojamientos que no tienen un poquito de higiene. Es un trapo tendido, es un colchón”, manifestó.
Cortez aseguró que si las autoridades les permiten los lenocinios vuelvan a operar, las trabajadoras sexuales y sus clientes cumplirán medidas de bioseguridad desde el ingreso al local.
“Nosotros vamos a dar bioseguridad, entra el cliente, se va hacer la desinfección, se le va cambiar de barbijo, de guantes, la compañera va estar con su barbijo, va estar con su mascarilla, su gel, vamos a dar toda la bioseguridad”, garantizó.
Por otro lado, Cortez protestó porque algunos alojamientos que funcionan ilegalmente como lenocinios realizan cobros excesivos a las trabajadoras sexuales por el uso de una de sus habitaciones y según ella, las autoridades no hacen contra ese tipo de acciones.
El sector advierte con asumir medidas de presión si las autoridades no atienden su pedido. “De no tener respuestas, vamos a hacer presiones, con huelga de hambre con nuestros hijos, vamos a entrar a trabajar nosotras, porque los alojamientos se han vuelto lenocinios las 24 horas, nadie dice nada, les cobran excesivamente a las compañeras”, protestó.
Al igual que cualquier otro ciudadano, las trabajadoras sexuales tiene derecho a trabajar, añadió Cortez a tiempo de observar que otros sectores están trabajando pese a que existe contacto físico y a su sector no se le permite trabajar.
“Hoy en día todo el mundo está trabajando, todo es contacto directo, la que vende carne, la panadera, la peluquera, todo, el taxi, el minibús que no hay ninguna seguridad ahí, nosotros también sabemos comer, nosotras preveemos violaciones. Cuántas violaciones hoy en día hay desde que el trabajo sexual está prohibido, estamos trabajando en las calles arriesgando nuestras vidas, nuestra libertad, trabajando en lugares infrahumanos, en lugares que no hay un poco de higiene, es por eso que queremos volver a los lenocinios a ejercer nuestro trabajo sexual con toda la bioseguridad y protocolos que hemos presentado al Ministerio de Salud”, manifestó.
De acuerdo con la representante de las trabajadoras sexuales, a nivel nacional 70.000 mujeres que se dedican a ese oficio esperan volver a trabajar, en El Alto están seis mil, en La Paz 17.000.
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