29 de diciembre (Revista Buen Vivir).- Las fiestas de Fin de Año pueden ser traumáticas para las mascotas. El método del vendaje, medicamentos tranquilizantes y un espacio seguro con música relajante son algunos consejos del veterinario para evitar el estrés y la ansiedad durante la bulla.
Los fuertes estruendos y destellos de los fuegos artificiales y cohetes, acostumbrados a usarse en días festivos, sobre todo al comienzo del nuevo año, pueden generar reacciones adversas, estrés y ansiedad en perros y gatos, manifestándose a través de comportamientos como temblores, babas, orinarse involuntariamente, escapar o incluso agresividad.
Enrique Mendieta Arce, médico veterinario, especialista en comportamiento y psicología, destaca la necesidad de evitar exponer a las mascotas a los fuegos artificiales y cohetes, comunes en las fiestas de fin de año, ya que les causa mucho estrés, miedo, ansiedad, llegando a afectar severamente su salud.
“Los perros tienen un rango de audición de 10.000 a 50.000 Hz, más del doble del ser humano, y la distancia a la que puede escuchar es cuatro veces más a la del hombre. Su oído es cuatro veces más afinado que el nuestro y puede registrar 35.000 vibraciones por segundo”, detalla Mendieta, al advertir el daño que se provoca al animal con los estruendos.
Para mitigar el efecto de los ruidos, se puede aplicar el método Tellington, que consiste en envolver con un vendaje alrededor del dorso.
“Hay que utilizar un vendaje y colocarle de manera estratégica, esto ayudará a que se mantenga segura y más relajada”, indica el veterinario, a tiempo de dar la explicación de cómo colocar.
En partes iguales, colocamos la venda o la tela en el pecho, cerca al cuello y llevamos hacia atrás, por la nuca, formando una X. Luego bajamos por el abdomen y formamos la segunda cruz, y terminamos en la espalda baja con un nudo a un costado de la columna. Debe estar lo suficientemente justa, pero no comprimir para permitir la circulación. Este método hay que aplicarlo de 45 a 60 minutos antes de que comience el estallido de los cohetes.
Otra opción es envolver el vendaje alrededor de la cabeza, tapando las orejas, de manera que se pueda disminuir el sonido.
Una tercera opción es consultar con el veterinario para usar medicamentos que tranquilicen a las mascotas. En las tiendas de mascotas hay dispositivos electrónicos con ciertos fármacos que tienen el mismo efecto.
Finalmente, crear un refugio tranquilo, como una habitación dentro de la casa, colocar música fuerte pero relajante o mantener el televisor encendido para distraer la audición.
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