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El agua recorre por la plataforma de la carretera (foto tomada por Adalberto Montenegro)

La Paz, 5 de abril (Urgentebo).-  Las intensas lluvias que cayeron en el país dejaron más de 15 mil familias afectadas y provocaron un peligroso incremento en el nivel de agua en ríos de siete departamentos del país.

El viceministro de Defensa Civil, Oscar Cabrera, informó el miércoles que los deslizamientos, tormentas y riadas ocurridos entre noviembre del año pasado y marzo último dejaron 28 muertos y 15.800 familias afectadas en al menos 44 municipios de siete departamentos de Bolivia.

Cabrera explicó que los fenómenos climáticos adversos afectaron también a más de 870 cabezas de ganado, 8.319 hectáreas de sembradíos y al menos 500 viviendas.

Los departamentos afectados por las lluvias son Potosí, La Paz, Chuquisaca, Cochabamba, Santa Cruz, Oruro y Tarija, donde los afectados reciben alimentos, herramientas y ayuda de las autoridades locales y nacionales, complementó.

"Defensa Civil cuenta con un presupuesto de 11,7 millones de bolivianos para atender estas emergencias, en el marco del plan de contingencias", remarcó Cabrera.

En La Paz, por ejemplo, en las últimas horas, una torrencial lluvia dejó varios domicilios y centros comerciales inundados en la población de Palos Blancos, al norte del departamento de La Paz.

De la misma manera, Tarija se encuentra en alerta naranja por la intendidad de las precipitaciones pluviales. En 10 días cayeron 600 milímetros de agua.

Desde Villamontes confirman que no tienen registros similares en 50 años. El fenómeno se extiende en la cuenca baja del Pilcomayo.

Entretanto que el en el oriente del país, las lluvias han provocado el peligroso crecimiento del nivel de los ríos.

El Servicio de Encauzamiento de Aguas y Regularización del Río Piraí (Searpi) informó que al menos en seis ríos se registró grande crecida a raíz de las fuertes lluvias que cayeron.

Luis Aguilera, director del Searpi, indicó que son seis los ríos más afectados: río Grande, Yapacaní, Parapetí, Ichilo, Piraí y Surutú.

“El río Grande ha registrado una crecida de 6 metros, lo normal es 3; en el río Yapacaní se tiene una crecida grande de 3,5 metros; el Parapetí reporta una crecida de 1,5 metros; el río Ichilo, de igual forma, una crecida de 12 metros y lo normal es de 6 metros; el Surutú, un metro y medio; mientras que en el río Piraí no se tiene grande crecida, sin embargo se les ha enviado las prevenciones a los dragueros y habitantes que viven en las orillas del río para evitar arrastres”, explicó Aguilera al momento de argumentar que los ríos continuarán con crecida considerable, a raíz de que las lluvias serán persistentes durante toda la semana en el departamento.