Octubre 08, 2024 -H-

El turismo boliviano sufre una crisis terminal por el agitado 2024


Martes 8 de Octubre de 2024, 11:00am






-

La Paz, 8 de octubre (Grecia Tórrez, Urgente.bo).- El turismo en Bolivia está en emergencia. Los conflictos sociales, la falta de políticas que incentiven el rubro y el “casi nulo” interés por crear una marca país han golpeado duramente al sector que, actualmente, no supera el 35% de visitantes en el sistema hotelero, cuyos empresarios demandan medidas urgentes para frenar el desempleo y el cierre de empresas.

Desde los conflictos de 2019, el sector turístico ha intentado paliar las afectaciones que dejaron los hechos de octubre y noviembre. Cuando empezaban a recuperarse, la pandemia por Covid-19 puso en pausa los nuevos proyectos del sector. Hasta el 2024, las pérdidas han sido innumerables y las soluciones muy pocas.

“Las pérdidas son cuantiosas, el turismo tiene un efecto multiplicador en diferentes áreas y rubros de la cadena productiva, hablo del artesano, del lanchero, de la gastronomía, de los hoteles, aerolíneas; en realidad, el efecto multiplicador que tiene el turismo ha ido en desmedro en los últimos años por todo lo que ha acontecido”, dijo Helen Canqui, gerente de la Cámara Departamental de Hotelería de La Paz, en contacto con El Compadre.

En 2019, el turismo fue el cuarto mayor generador de divisas de Bolivia, batiendo el récord de producción de la soya. Creó aproximadamente 400 mil empleos para los ciudadanos bolivianos y obtuvo 92 dólares de retorno por cada dólar invertido en turismo. Sin embargo, las diferentes adversidades posteriores redujeron estos números.

Antes de los conflictos del 2019, el turismo cuantificaba llegaba al 75% de ocupación hotelera, pero después de la pandemia y los últimos conflictos sociales de junio como el supuesto golpe de Estado liderado por Juan José Zúñiga, esta cifra se redujo a un 35% de ocupación. Fuentes del sector gastronómico informaron que a los hechos del 26 de junio se sumaron la marcha liderada por Evo Morales, desde Caracolllo a La Paz, y los incendios que afectan al oriente boliviano, como factores adicionales para la reducción del servicio turístico. “Bolivia sufre conflicto tras conflicto y los turistas cancelan los viajes ante las alertas que emiten las embajadas a sus nacionales”, dijo la fuente.

“Y las pérdidas son cuantiosas, esta situación se va agravando más y para nosotros es cada vez más complicado en el rubro”, añadió Canqui.

Tras la pandemia, el sector hotelero vio una esperanza para resurgir entre las cenizas para reactivar el rubro con la promoción de lugares atractivos de Bolivia para los extranjeros, pero los intentos por incrementar las visitas fracasaron. Hasta la fecha el 40% de empresas en La Paz tuvieron que cerrar sus instalaciones por falta de ingresos y, ahora, amenaza a otros sectores.

“Evidentemente, la hotelería tiene mucho personal, nosotros trabajamos las 24 horas, eso quiere decir que tenemos tres turnos: los de la mañana, la tarde-noche y los de la noche, y ya no podemos sustentar ni pagar los sueldos de nuestros trabajadores. Recientemente han cerrado empresas grandes que trabajaban muy bien en el ámbito de turismo y hotelería, ha sido por todas estas situaciones que han decidido irse definitivamente”, añadió Canqui.

El viceministro de Turismo, Iver Flores, señaló que, desde el lunes 16 de septiembre hasta el domingo 22 de septiembre, fecha en la que se instalaron bloqueos en la ruta turística hacia Copacabana en La Paz, las pérdidas en turísmo ascienden a 3,5 millones de bolivianos, sólo en siete días. Dichos conflictos sociales afectan no solo al departamento paceño, sino a todo el país.

“Hemos hecho una estimación y, por el turismo interno, se está perdiendo por día 368 mil bolivianos y, por el turismo receptivo, más de 103 mil bolivianos. Eso hace un total de 471 mil bolivianos que se pierden por día, es decir casi medio millón de bolivianos sólo en el sector del Lago Titicaca”, detalló la autoridad.

Más de 2.000 familias fueron afectadas tras las pérdidas por bloqueos y conflictos sociales en Bolivia en el último tiempo, según el presidente de la Cámara Boliviana de Turismo.

div class="media media-element-container media-default">

Un turismo boliviano con deficiencias

La Cámara Departamental de Hotelería de La Paz hace frente a las adversidades sociales, políticas y económicas, porque el turismo es “susceptible” a todo tipo de cambio y porque ante la más mínima amenaza genera grandes pérdidas para quienes impulsan las empresas por detrás.

Para Canqui, los daños al rubro trascienden desde formas estructurales y la falta de políticas para incentivar que extranjeros visiten el país y así activar la economía naranja.  La especialista resalta tres factores importantes que demuestran la decadencia en el turismo boliviano.

La ausencia de una marca país vigente. “Se cree que una marca país es una marca de Gobierno y no es así, este tipo de situaciones nos perjudican”, dijo Canqui, y evidentemente es cierto, pues los países con mayor ingreso de turistas tienen afianzada la marca que los representa. Es el caso de Perú que visualiza una “P” y el color rojo. Bolivia necesita trabajar en la promoción internacional.

La falta de conectividad aérea entre países. Bolivia no cuenta con el espacio necesario para nuevas aerolíneas que permitan la conectividad se sectores turísticos de un lado del mundo con los del país.

“Sin ir muy lejos, quien más aprovecha el salar de Uyuni es Chile y penosamente nosotros no logramos avanzar. Tenemos un aeropuerto internacional que tiene vuelos directos desde Hong Kong en nuestra frontera, y Chile es beneficiado por esta conectividad aérea que ha permitido que en su país se puedan movilizar de manera adecuada a los turistas”, añadió Canqui.

El sistema turístico ineficiente que tiene Bolivia para que los visitantes accedan a páginas de información “es una de las grandes fallas que tiene el Viceministerio de Turismo”.

“Llegamos a momentos muy difíciles, de dónde pueden sacar los turistas la información, tenemos que trabajar de manera conjunta y esto también un llamado a las instituciones central, departamental, municipal para reactivar un sector que creemos que la alternativa como un nuevo modelo de desarrollo económico de nuestro país que atrae divisas norteamericanas”, señaló.

//

.