En la Mesa Redonda de Alto Nivel sobre Financiamiento Climático, que es parte de la 29° Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP29), la Ministra de Relaciones Exteriores de Bolivia, Celinda Sosa Lunda, realizó un llamado a la comunidad internacional con cuatro prioridades para que los financiamientos climáticos respondan a las verdaderas necesidades de quienes enfrentan mayores riesgos, en función a los efectos de la crisis climática.
“La primera prioridad es el acceso simplificado al financiamiento: urge eliminar barreras burocráticas y acelerar el acceso a los fondos. Las comunidades afectadas no pueden esperar, y la implementación de los recursos debe ser rápida y eficiente”, dijo durante su participación en la Mesa Redonda.
También nombró el apoyo directo a los países en desarrollo, donde Bolivia abogó por un financiamiento que priorice subvenciones en lugar de préstamos, así como una mayor utilización de Derechos Especiales de Giro (SDRs) como opción de financiamiento sin deuda, especialmente para iniciativas de adaptación y resiliencia.
La tercera prioridad responde al establecimiento del fondo de pérdidas y daños. Este fondo debe contar con contribuciones constantes de los países desarrollados, y debe enfocarse en brindar apoyo directo a los países que ya están sufriendo los efectos más graves del cambio climático.
La cuarta propuesta por el Estado boliviano es la colaboración global para un Nuevo objetivo colectivo cuantificado sobre financiación climática (con sus siglas en inglés NCQG) ambicioso. La Canciller resaltó que es fundamental que el NCQG responda tanto a la urgencia de las necesidades de los países en desarrollo como a la capacidad de los países desarrollados de cumplir sus compromisos.
“Nuestro país está comprometido con un enfoque de justicia climática. Creemos que los recursos climáticos deben estar en sintonía con las necesidades de aquellos que enfrentan los mayores riesgos y que deben implementarse de manera que respeten la dignidad y los derechos de los pueblos”, destacó Sosa Lunda.
La Mesa Redonda de Alto Nivel tenía como objetivo catalizar el diálogo sobre la transformación del financiamiento climático internacional, haciéndolo más receptivo, equitativo e innovador, abordando soluciones para aumentar su escala, alcance y efectividad.
De esta forma, la Canciller boliviana concluyó la primera jornada de su agenda dentro de la COP29, misma que inició el lunes y se extenderá hasta el 22 de noviembre de 2024, reuniendo a líderes gubernamentales, empresariales y de la sociedad civil en busca de soluciones a la crisis climática.