La Paz, 06 de octubre (Urgentebo.com).- La española Corsan-Corviam, que es subsidiaria de Isolux, ha abandonado los dos proyectos que se había adjudicado en Bolivia y se arriesga a que el Estado Plurinacional ejecute las boletas de garantía que suscribió para un proyecto hidroeléctrico y otro para la construcción de una carretera en el norte de La Paz.
Corsán Corviam se adjudicó la ejecución del Proyecto Hidroeléctrico Miguillas y la construcción de la carretera Ixiamas-San Buenaventura.
De momento, las autoridades nacionales han confirmado que las oficinas abiertas en Bolivia por parte de la compañía están vacías y que en el lugar de las obras, no hay movimiento de máquinas ni hombres trabajando.
La Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) informó, en un boletín de prensa, que constató que la empresa española había abandonado el pasado 31 de marzo la construcción de la carretera, que se adjudicó por 136,9 millones de dólares.
En ese sentido, la presidenta de la ABC, Noemí Villegas, informó a la empresa Corsán – Corviam tiene 15 días para justificar o rectificar el abandono de las obras de la carretera Ixiamas – San Buenaventura que se ejecuta en el Norte de La Paz.
La ejecutiva señaló que mediante una nota enviada el martes 04 de abril la ABC conminó a la contratista restablezca la construcción y presente un informe sobre el abandono de la obra. Dijo que cumplido el plazo – de acuerdo a la normativa - se decidirá si continúa el proyecto o se optará por la resolución del contrato.
Indicó que se anticipó 49 millones de dólares a Corsán-Corviam por la ejecución de este proyecto, monto que representan un 37% del costo total.
“Personal de la ABC y la supervisión verificó que en las oficinas estaban cerradas y no había personal ni maquinaria haciendo los trabajos de acuerdo al cronograma de construcción”, dijo al manifestar que no se tiene explicación alguna por parte de la empresa sobre el abandono a las obras.
Villegas precisó que la boleta de garantía por 235 millones de bolivianos está aún vigente hasta el año 2019 y que será ejecutada en caso de optarse por la resolución del contrato con la empresa española.
La construcción de la vía de 113,5 kilómetros, a cargo de Corsán-Corviam, se inició en mayo de 2015.
El proyecto hidroeléctrico
Por su parte, la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) notificó a la firma española Corsán-Corviam la intención de resolución de contrato por deficiencias en la construcción de la planta hidroeléctrica de Miguillas, en La Paz, y advirtió que ejecutará las boletas de garantía del proyecto que superan los 117 millones de dólares si no retoma el cronograma de trabajo acordado, se informó.
El ministro de Energías, Rafael Alarcón, indicó que el contrato establece un determinado período para que la firma española retome los trabajos de la hidroeléctrica Miguillas hasta el próximo 16 de abril, de lo contrario, se procederá a la ejecución de las boletas de garantía.
Publicaciones de la prensa española dan cuenta que de Isolux, cuya subsidiaria es Corsan Corviam, se encuentra en una crisis de la que no puede salir desde mediados del 2016. Por ejemplo, en junio de 2016, el diario La Voz de Galicia reportó un retraso de varios meses en la construcción de una central hidroeléctrica adjudicada a Isolux.
Se informa también que a fines de 2016, la empresa conjuró un plan de rescate financiero con la participación del Banco Santander, que decidió vender la deuda de Isolux. Dicha determinación puede influir en el respaldo que otras dos entidades habían comprometido para la empresa especializada en ingeniería.
El Ministro de Obras Públicas, Milton Claros, dijo que no descarta ejecutar las boletas de garantía de la empresa española Corsán Corviam, debido al supuesto abandono de las obras que ejecutaba en el país, el Proyecto Hidroeléctrico Miguillas y la carretera Ixiamas-San Buenaventura.