El presidente de Argentina, Javier Milei, instruyó a su Gobierno iniciar las gestiones necesarias para prohibir el uso del lenguaje inclusivo en el aparato público. La información la confirmó este martes (27.02.2024) el vocero presidencial argentino, Manuel Adorni, durante su habitual comparecencia ante los medios en el Salón de Conferencias de la Casa Rosada.
Tras señalar que Milei dará su discurso de inicio de sesiones de la Asamblea Legislativa el 1 de marzo a las 21 horas, confirmando un cambio de horario "para que la mayor cantidad de argentinos puedan escuchar al presidente luego de su horario de trabajo”, agregó que se prohibirá el uso del lenguaje inclusivo "y todo lo referente a la perspectiva de género en toda la administración pública nacional”.
Para mayor abundamiento, detalló que "no se va a poder utilizar la letra E, el arroba ni la X, y se va a evitar el innecesario uso del femenino en todos los documentos de la administración pública”. Adorni añadió que "el lenguaje que contempla a todos los sectores es el castellano, el español, así que no veo que haya que tener estructuras”. No alcanzó a terminar la frase porque una periodista le hizo ver que hay un debate sobre el uso del lenguaje inclusivo.
"Bueno, es un debate en el cual nosotros no vamos a participar porque consideramos que las perspectivas de género se han utilizado también como negocio de la política, así que para nosotros esto no tiene discusión”. Adorni agregó que recientemente una resolución similar la había adoptado ya el Ministerio de Defensa, por lo que esta medida simplemente extendía esa decisión "al resto de las dependencias”.
De hecho, el día anterior el Gobierno había señalado que palabras como "soldada”, "generala” o "soldades” eran una desnaturalización de nuestro idioma. "Prohíbase la utilización del llamado 'lenguaje inclusivo' en el ámbito del Ministerio de Defensa, las Fuerzas Armadas y los organismos descentralizados del ministerio", dice la resolución publicada el lunes 26 de febrero, pero firmada el viernes anterior por el ministro Luis Petri.
Fuente: DW