La Paz, 15 de septiembre (Agencias).- El Congreso peruano, dominado por la oposición, obligó el viernes a renunciar a todos los ministros tras no renovarle la confianza y desató una crisis política que forzó al presidente Pedro Kuczynski a suspender su viaje a las Naciones Unidas.
Es la primera vez que bajo la vigencia de la constitución aprobada en 1993 un parlamento toma una decisión de esta magnitud.
Kuczynski dijo a través de su cuenta oficial de Twitter que agradecía a su "primer ministro y su gabinete, que trabajaron por proteger las políticas de Estado en beneficio del país". Con el gabinete ministerial disuelto el presidente tiene, según la ley, tres días para conformar un nuevo equipo.
La carta magna establece que cuando un presidente forma su equipo ministerial sus integrantes deben necesariamente obtener "el voto de confianza" del Parlamento que, para un equilibrio de poderes, es el que autoriza o no a gobernar a un gabinete.
La crisis comenzó el miércoles cuando al fin de una huelga de maestros el partido liderado por la hija del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000), pretendió empujar a la renuncia a la ministra de Educación, la segunda de esa cartera en menos de un año debido a que su antecesor también había sido forzado a dimitir por el Parlamento.
Los do
entes, que estuvieron de paro por más de 60 días, reclamaban un aumento de salarios.El saliente primer ministro Fernando Zavala dijo entonces que la decisión parlamentaria afectaba la "gobernabilidad del país" por lo que solicitó la "confianza" para su equipo ministerial.Tras un acalorado debate en el que la oposición incluso insultó al primer ministro, en la madrugada del viernes el Parlamento rechazó el pedido de confianza por 77 votos a favor y 22 en contra y obligó a renunciar a Zavala junto a sus 18 ministros.
Kuczynski ahora tendrá que formar un nuevo equipo que deberá obtener obligatoriamente la confianza del Parlamento. Si el Legislativo rechaza a los nuevos ministros el presidente tiene la opción de disolver el Congreso y convocar a elecciones parlamentarias.
Keiko Fujimori, hija del encarcelado expresidente y líder del partido opositor que domina el Parlamento, no se ha pronunciado hasta ahora sobre la votación.