Los asesinos de Fidel Esteban Yupanqui, un vecino del barrio 16 de julio que procuraba vender su inmueble y que cayó en las manipulaciones de su abogado y amigo, están finalmente detenidos. El autor del delito ocurrido a fines del 2023 es el abogado Ramiro Sarzuri Mamani, de 46 años, quien fue detenido en la ciudad de Tarija, y en cuya cárcel, la de Morros Blancos, deberá ser recluidos por 30 años.
El Juzgado 5º de Instrucción Anticorrupción de El Alto determinó 30 años de cárcel sin derecho a indulto a cumplir en el penal de Morros Blancos de la ciudad de Tarija, tomando en cuenta su última dirección. El abogado Sarzuri era un de las últimas personas que se mantenían en libertad en este caso de asesinato que conmocionó a la población alteña, desde febrero pasado cuando la Policía halló el cuerpo sin vida enterrado bajo las escaleras de la vivienda que iba a ser transferida.
La Fiscal de Delitos Contra la Vida, Sarina Guardia, informó que, de acuerdo a los antecedentes, a finales de 2023, Fidel decidió vender su casa ubicada en la zona 16 de Julio de El Alto, razón por la cual contactó a su amigo y abogado, Sarzuri Mamani, quien desde ese momento planeó cómo quitarle la vida para quedarse con el inmueble, para ello, contactó a los otros siete involucrados para lograr su cometido.
“El plan fue ejecutado el 28 de diciembre de 2023, cuando el abogado junto a sus coautores y cómplices fueron a la casa de Fidel indicando que eran posibles compradores del inmueble, después recorrieron los ambientes y cuando llegaron a la última planta, uno de los involucrados agarró por el cuello a la víctima hasta dejarlo inconsciente, después pusieron sus huellas en hojas blancas para validar la compra y venta del inmueble, pero cuando la víctima estaba recobrando la conciencia lo amarraron y le quitan la vida asfixiándolo con una bolsa de nailon”, explicó la fiscal.
Después del hecho los sindicados no pudieron sacar el cuerpo y decidieron enterrarlo bajo las gradas del mismo domicilio, después se presentaron con los inquilinos y familiares de la víctima como los nuevos propietarios de la casa. Días después, los familiares del Fidel presentaron la denuncia por su desaparición, en ese marco, se realizó el allanamiento del inmueble donde se encontró el cuerpo de la víctima.
Según el informe de la Policía, el inmueble debía venderse en 400.000 dólares, pero el comprador adelantó alrededor de 200.000, razón por la que Yupanqui seguía viviendo en el domicilio junto a los nuevos propietarios.
El caso de Fidel Esteban Yupanqui conmocionó a la población alteña. Era un hombre de 57 años, quien se encontraba desaparecido desde el 28 de diciembre, según se lee en la ficha de “Persona desaparecida”, de la oficina de Trata y Tráfico de personas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC).
El 2 de enero María Yupanqui, hija del fallecido, recibió la llamada de una tía que le dijo no poder ubicar a Fidel desde el 30 de diciembre. En la casa encontraron a Efraín Saico, quien dijo haber comprado el domicilio, que había pagado 200 mil dólares y debía un saldo igual.
A los días el supuesto abogado llamó a la familia para decir que el hombre se había ido de viaje y pedir que “no molesten” al nuevo dueño. La hija no le creyó y denunció el caso. Inicialmente se tipificó como trata y tráfico, pero luego se cambió a asesinato cuando allanaron la casa con canes especiales y encontraron el cuerpo enterrado bajo una capa de cemento y azulejo.
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