La Paz, 1 de diciembre (Urgentebo).- Disputada la décimo séptima fecha del torneo apertura, el título se ha reducido a una lucha entre dos equipos. Los dos grandes del fútbol paceño no dan su brazo a torcer y sostienen una lucha cabeza a cabeza por hacerse con la punta del torneo.
Hasta antes de la jornada que se disputó a mitad de semana, 5 puntos eran los que separaban a Bolívar de su inmediato perseguidor; pero el empate que Bolívar consiguió en Sucre y la victoria del Tigre en Montero hicieron que la diferencia de puntos se reduzca a 3, es decir, hay sólo un partido de diferencia entre ambos con 5 fechas por jugar.
Además, a ambos equipos les espera un fixture por demás complicados. Los dos tendrán que jugar tres partidos en condición de visitante y sólo dos de local.
El líder, Bolívar, tendrá que visitar a Nacional Potosí en la siguiente fecha; después recibirá la visita de Real Potosí; viajará a Cochabamba para jugar con Wilstermann; recibirá a Blooming y terminará el torneo visitando a Sport Boys.
En cambio, el Tigre deberá visitar a Real Potosí el próximo domingo; viajará a Yacuiba para enfrentar a Petrolero, recibirá la visita de Nacional Potosí; tendrá que ir al Tahuichi Aguilera para jugar contra Oriente y cerrará el torneo recibiendo a San José.
Es por eso que lo más probable es que el torneo se decida por cuál de los dos equipos consiga más puntos en condición de visitante, y la misión no será fácil pues ambos equipos enfrentarán visitas de alto riesgo.
Es llamativo que ambos deberán visitar los escenarios de sus dos “bestias negras”. Bolívar deberá visitar a Sport Boys – equipo al que nunca pudo ganar en Santa Cruz- y el Tigre a Petrolero, donde sólo pudo conseguir una victoria en los últimos 4 años.
Claro, por cómo está la tabla el Tigre tiene cero margen de error. Debe ganar todo lo que le queda y esperar un tropezón de Bolívar, pues la Academia aún le lleva los tres puntos que le ganó en el primer clásico del torneo.