18 de septiembre (Xinhua).- El hallazgo y exhumación de 17 vasijas prehispánicas, residuos de alimentos, y estructuras modificadas del templo de Kalasasaya, en Tiwanaku, en el departamento de La Paz, permitirá reescribir su historia, aseguró el arqueólogo Julio Condori.
"Con las actuales excavaciones y hallazgos vamos a corregir, de manera minuciosa, cuál ha sido el historial de la ocupación del Kalasasaya", dijo el profesional.
Condori, director del Centro de Investigaciones Arqueológicas, Antropológicas de Tiwanaku (CIAAT), explicó que "este hallazgo e investigación nos permitirán esclarecer muchas dudas", como el saber "qué es posterior al abandono de este templo y antes de su restauración".
El hallazgo se encuentra al interior de Kalasasaya, a unos 50 metros detrás del monolito Ponce, en el muro interior sobre las plataformas donde existen las construcciones y monumentos de la cultura Tiwanaku.
En el año 2000, el Centro Espiritual y Político de la Cultura Tiwanaku fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Dicho nombramiento reconoce su valor universal excepcional, expresado en la concepción y maestría constructiva de los templos y de la estatuaria monumental.
Tiwanaku, ubicado en el altiplano boliviano, se encuentra a unos 70 kilómetros de la ciudad de La Paz (oeste), y está a casi 4.000 metros de altura en pleno corazón de América del Sur.
Para replantear su historia, según el experto, hay gran cantidad de material fotográfico y bibliográfico sumado a los recientes hallazgos que muestran que la forma original no es la de la actual reconstrucción, que es cuadrangular con cuatro muros.
Con base en los resultados de estas investigaciones, se replanteará el circuito interno de Kalasasaya, lo que implica hacer un nuevo trazo técnico para mostrar, de manera estructural, su arquitectura antes de las restauraciones hechas anteriormente, añadió.
Kalasasaya, que en lengua aymara significa "piedras paradas", fue el centro ceremonial del complejo Tiwanaku, el cual es el templo más grande del lugar, con 128,66 metros de largo por 119,06 de ancho.
La estructura de este templo es rectangular, y está basada en columnas de arenisca y piedras labradas, entre las cuales hay conductos de desagüe para las aguas pluviales.
Tras una ceremonia andina de pago a la tierra y permiso de los ancestros, los arqueólogos y autoridades originarias de Tiwanaku procedieron a la exhumación ante los periodistas que fueron invitados a ser testigos del hallazgo.
Condori precisó que por la estructura y forma en la que se hallaron vasijas prehispánicas y restos de alimentos de la cultura Tiwanaku, que datan de entre 300 y 600 años d.C, no se descarta que se encuentren restos humanos y se trate de un entierro ceremonial.
Esta hipótesis se comprobará cuando concluyan las excavaciones debajo de los objetos descubiertos, que se prevé sea en los próximos días.
///