Diciembre 25, 2024 -H-

La Cancillería asumirá los gastos para la repatriación de la boliviana que fue asesinada en Chile

Mediante un comunicado, la Cancillería señaló que asumirá los gastos para la repatriación de Miriam Rosalva Gómez Bejarano, una vez que se cumplan los procedimientos administrativos internos.


Jueves 31 de Agosto de 2017, 1:15pm






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La Paz, 31 de agosto (Urgentebo) .- La Cancillería de Bolivia gestiona la repatriación de Miriam Rosalva Gómez Bejarano, la joven de nacionalidad boliviana de 23 años que  fue brutalmente asesinada en Iquique, Chile. Su cuerpo fue encontrado en la curva de una ruta, tenía las manos y los pies atados y un disparo de arma de fuego en la cabeza.

“Desde el momento en el que se tomó conocimiento de este hecho lamentable, la Cancillería, a través del Consulado de Bolivia e  Iquique y en coordinación con la Dirección General de Asuntos Consulares, han mantenido comunicación con los familiares de la connacional y están acompañando a la madre en la realización de los trámites y las gestiones requeridas por las instituciones chilenas, para la pronta repatriación de los restos mortales a Bolivia, en cuanto el Instituto Médico Legal libere el cuerpo ya que el mismo se encuentra judicializado”, señala el comunicado.

La joven era  de Cochabamba y vivía hace dos años en el vecino país. Además señala que los gastos a la repatriación serán cubiertos por la Cancillería una vez que se cumplan los procedimientos administrativos internos.

“Asimismo, el Ministerio de Relaciones Exteriores del Estado Plurinacional de Bolivia solicitará a las autoridades de la República de Chile, se dé celeridad a la investigación y esclarecimiento de los hechos, para dar con el paradero de los autores de este cruel asesinato, y realizará el seguimiento respectivo para que se haga justicia”, finaliza el comunicado.

Rosalva  fue vista por última el lunes por la tarde por sus compañeras de trabajo en la peluquería D’Saloon, donde trabajaba hace aproximadamente un año. Se conoció que la víctima había llegado a vivir a Chile sola y dejó en Bolivia a su hija, de siete años, que quedó en la orfandad tras el crimen de su madre.

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