12 de marzo (Urgentebo).- Una amiga mía, cuando fue arrestada en la ciudad de Santa Cruz, el 2017, fue llevada a un lugar apartado a las celdas judiciales, la golpearon y luego la violaron, declaró este martes al portal Urgentebo S. M, reclusa de una de los recintos penitenciarios de La Paz.
Es el testimonio que recogió este medio digital por parte de una interna de una de las cárceles paceñas. Ella de manera amable respondió nuestras consultas. Sentada en una silla y ante la vista de otras internas, comenzó a contar la triste historia.
“(Mi amiga) me contó que la golpearon como si fuera un hombre, luego le abrieron las piernas, la violaron y luego le dijeron: puta de mierda, no vas a decir nada de lo que ha pasado porque el policía nunca pierde; empata o gana”, relató.
S. M., indicó que la víctima le comentó que luego de ese episodio quedó afectada física y psicológicamente y, aun peor, no reconoció a ninguno de los uniformados porque estaban con pasamontañas.
Pero lo más grave es que este tipo de hechos son recurrentes en cárceles de regiones alejadas del país y en celdas judiciales, en su mayoría, en las ciudades de La Paz y Santa Cruz, puesto que en estos lugares los policías se aprovechan de las detenidas para cobrarles por todo y nada. Incluso son los uniformados que les venden medicamentos cuando están enfermas.
En diciembre del 2018, S. M. fue llevada a celdas judiciales de la urbe paceña. Dos policías la custodiaban, uno de ellos abandonó la guardia y el otro se emborrachó.En estado de ebriedad el funcionario de la institución verde olivo la comenzó a buscar con una linterna, la quería violar.
“Me ha empezado a manosear y yo me he puesto fuerte porque me he dado cuenta que estaba borracho (el uniformado), se quería aprovechar. Ahí en las celdas habían tres chicas jovencitas más conmigo”, agregó.
El viernes pasado, el senador de Unidad Demócrata (UD), Yerko Núñez, denunció con un video que una mujer de nacionalidad brasileña fue violada en reiteradas oportunidades, por tres policías que custodiaban la carceleta de Rurrenabaque (Beni).
“Me ha tapado de mi boca y me ha violado, no sabía cómo correr, gritar, porque no había nadie para pedir ayuda. (…) Me han embarazado una vez y me han dado para abortar” cuenta la víctima en el materia audiovisual.
Tras este hecho, los uniformados fueron apartados de sus cargos de manera temporal hasta que esclarezca el hecho. Asimismo, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, dijo que se envió un equipo de investigadores de La Paz para indagar este caso.
En la presente jornada, en nota de ANF, C. P. y M. R. dos mujeres que están detenidas preventivamente en la cárcel de Reyes (Beni), manifestaron que también fueron vejadas sexualmente por los uniformados Edwin T. C, Alan A y Franklin C.
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