Marzo 28, 2024 [G]:

Neymar está en una juerga con 500 invitados y en el auge de la pandemia en Brasil

El jugador brasileño, que cobra 36 millones de euros anuales en el PSG, ordenó construir una discoteca subterránea en su lujosa propiedad y ahí se ha atrincherado con sus allegados hasta el 1 de enero.


Domingo 27 de Diciembre de 2020, 11:15am






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27 de diciembe (ABC).- Los excesos de Neymar se superan a sí mismos como en una carrera sin fin. Pero tal vez su fiestón de fin de año bate todos los récords: la juerga está en marcha en una mansión al sur de Río de Janeiro, con 500 invitados sin mascarilla bailando y divirtiéndose durante cinco días.

El jugador brasileño, que cobra 36 millones de euros anuales en el PSG, ordenó construir una discoteca subterránea en su lujosa propiedad y ahí se ha atrincherado con sus allegados hasta el 1 de enero.

Un delirio que ni el mismísimo Maradona en su día se hubiera atrevido a montar con tal descaro, saltándose todas las normas de precaución vigentes en plena pandemia y prohibiendo desembarcar con teléfonos móviles. Nada extraño, por tanto, que la polémica y la indignación se extiendan por Brasil y por Portugal, donde el delantero tiene grandes amistades y la televisión del país sudamericano exhibe su pegada comercial por causa de la afinidad lingüística.

«Es un escándalo», titulaba el diario portugués más vendido, «Correio da Manha», destacando que el espectacular delantero de 28 años está cruzando todos los límites aprovechando que se encuentra de baja por lesión y solo regresará a los terrenos de juego muy cerca de la reanudación en febrero de la Champions League, donde el equipo parisino se verá las caras con el Barcelona.

Pero es que, además, Neymar se confirma como el futbolista más conquistador del momento. El explosivo delantero brasileño del PSG se encontraba saliendo hace unos meses con la modelo cubano-croata Natalia Barulích, pero una nueva mujer ocupa su lugar últimamente.

Se trata de su compatriota Gabily (22 años), quien lo encandila con sus canciones de éxito infalible y unas «armas de mujer» que lo han atrapado. Tanto es así que el aspirante al Balón de Oro no ha podido resistirse y mantiene un romance con Gabriela Batista, que ese es su verdadero nombre.

Lo más curioso es que la pareja ha decidido no ponerse demasiadas obligaciones los días que conviven… hasta el punto de que ambos han sellado un pacto para llevar una «relación abierta». Abonan así el terreno para que cada uno pueda apagar su fuego con otras personas, que ya se sabe que los brasileños son muy proclives a dejarse arrastrar por las pasiones.

Neymar se ha dado a los placeres de la vida

Gabily, que arrasó en su país con temas como «Cansei de ser fiel» o «Adulterio», parece haberse especializado en un pop con barniz picante, muy acorde con su perfil descarado.

A medida que van pasando las semanas, los lazos entre los dos se van estrechando, incluso aunque la exclusividad no sea precisamente uno de los factores en juego. De hecho, ella ya ha visitado al exjugador del Barcelona en su mansión a las afueras de París. Toda una señal de que, pese a los devaneos tolerados, los vínculos parecen ir afianzándose.

Todo comenzó cuando el pasado mes de marzo se suspendió la Liga francesa a causa de la pandemia del coronavirus. Neymar aprovechó el parón para salir de Francia e instalarse en su fantástica casa con terreno al sur de Río de Janeiro. Y allí, en una de esas polémicas fiestas que celebraba en pleno confinamiento general (menos en Brasil, donde el presidente Bolsonaro tardó en aplicar la medida), conoció a Gabriela. Mejor dicho, entabló contacto en persona porque habían estado cruzándose mensajes (cada vez más subidos de tono) a través de Instagram.

La situación corría el peligro de enfriarse cuando al capitán de la selección «canarinha» no le quedó más remedio que retornar a su domicilio francés porque se reanudaba la Ligue 1. Pero el «crack» no estaba dispuesto a permitirlo y entonces invitó a la cantante a pasar una temporada en su enorme y fastuosa vivienda próxima a la Ciudad de la Luz.

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