7 de octubre (Urgente.bo).- A 11 días de las elecciones y a al menos dos meses de la transición del Gobierno, la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) y el Órgano Ejecutivo deberían prestar más atención a dos temas: el primero a garantizar unas elecciones transparentes y a preparar informes para entregar el mando a las nuevas autoridades electas en las urnas este 18 de octubre, según el politólogo Marcelo Silva.
“Tanto el Ejecutivo como el Legislativo deberían estar preocupadísimos en dos temas: la primera es garantizar un proceso electoral que sea absolutamente transparentes y sentar todas las condiciones, por su puesto desde sus atribuciones, para que ese proceso electoral sea transparente, esté en tranquilidad y que el ciudadano sienta toda la seguridad para ir a votar el 18 de octubre. (…) La segunda tarea importantísima que tienen que hacer ambos poderes del Estado es preparar los informes para la transición al nuevo Gobierno”, explicó el analista político.
Silva señaló que en el informe, el Legislativo precisar sobre lo que realmente les falta y qué fue priorizado, esto para que la nueva correlación de fuerzas políticas, que sea emanada de la votación popular, pueda asumir esa transición sin mayor riesgo y no perder tiempo en el ámbito de estar buscando información, etc., que es lo más importante.
De acuerdo con la diputada Lourdes Millares, estando a unos días de las elecciones y a semanas de la transición de Gobierno, ya no corresponde que el Legislativo esté aprobando leyes como la modificación a la Ley 044, de Juicios de Responsabilidades a Presidente, Vicepresidente, altas autoridades del Órgano Judicial y de la Fiscal General del Estado.
Silva acotó que el Órgano Ejecutivo, dentro de sus atribuciones marcadas en el ámbito de la seguridad, la logística que manejar un aparato institucional muy grande, recursos logísticos, materiales, la predisposición de mandos como la Policía, el Ejército, la posibilidad de vehículos, debería estar plenamente disponibles y puestos a disposición del Tribunal Supremo Electoral (TSE) para que no tenga ningún tipo de necesidad y sobresalto.
“De la misma manera, el Legislativo debería estar velando desde el ámbito político de los correligionarios políticos, pero también en el ámbito de los llamados constantes a la pacificación, a que el ciudadano exprese su voto de forma pacífica”, complementó.
El Legislativo, dice Silva, también debería esbozar algún tipo de intento de acuerdo parlamentario o acuerdo político para que los candidatos del proceso electoral puedan respetar el resultado emergente de las elecciones.
En el caso del Ejecutivo, esa instancia debería preparar un informe sobre el estado real del país, el informe económico, salud, educación, desarrollo, qué se ha hecho con la plata de los créditos, dónde y cómo se ha mejorado la salud.
“Es más, después del 18 de octubre, sea cual fuese el resultado, el ejecutivo debería agendar un proceso de apertura de oficina e instancias públicas y demás a los que podrían ocupar la presidencia del país a partir de noviembre o diciembre, según el resultado de las elecciones. Como en todas partes del mundo, el lunes y martes si es que hay un ganador la presidenta debería invitar a sus oficinas al ganador o a los que van a competir en una segunda vuelta para decirles y ratificarles que todo el proceso de transición está a su disposición”, comentó.
