26 de febrero (Urgente.bo)- Elio Camacho, un recluso de la cárcel de San Roque, en Sucre, era el líder de una banda criminal que se dedicaba a la estafa con ofertas de trabajo, incluso, se hacía pasar como autoridad.
El modus operandi de Camacho era pedir hojas de vida para ofrecer contratos y a cambio pedía una suma de dinero. En total se investiga a seis personas que se dedicaban a dicho delito, informó el viceministro de Régimen Interior, Jhonny Aguilera,
De acuerdo al reporte, el hombre se hacía pasar por viceministro de Vigilancia Epidemiológica y Medicina Tradicional y ofrecía ítems a través de grupos de WhatsApp.
“Se contactaban con los titulares de estas hojas de vida o con titulares de las empresas para decirles que había contratos, que había ítems y que ellos debían depositar una suma de dinero, les pasaban QR y cuentas bancarias”, relató la viceministra de Transparencia, Susana Ríos.
Los montos equivalen entre 2.000 y 3.000 bolivianos a personas; y 10.000 bolivianos a empresas.