“Estamos lejos, cada vez más lejos y no solo de Argentina y Brasil -que son los líderes- sino del Paraguay. Hace unos años Paraguay estaba en un nivel de producción de soya similar al de Bolivia, pero hoy nos triplica en producción y rendimiento -que está en 2,7 a 2,8 toneladas por hectárea- casi un 30% más de lo que producimos en Bolivia”, dijo Guillermo Rocco, Vicepresidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (ANAPO), en el Programa “A Primera Hora” (EL DEBER RADIO, 10.1.19). Añadió que el sector estaba estancado, pues luego de llegar a un tope de 3 millones de toneladas el 2014, decayó por el clima, las plagas y el no poder usar plenamente la biotecnología.
A diferencia de Bolivia, Paraguay expandió el área de siembra de soya de 1,3 millones de hectáreas (año 2000) hasta 3,4 millones en 2017/2018, pasando la producción de 3,5 millones a 10 millones de toneladas, aumentando su rendimiento gracias al extendido uso de semillas genéticamente mejoradas.
En Bolivia el área de siembra de la soya es casi la misma desde hace diez años y si bien el rendimiento mejoró desde 1,73 ton/ha del año 2005 a 2,2 en el último quinquenio con la utilización del único evento biotecnológico autorizado, la sequía e insectos hacen estragos con nuestra soya.
Rocco dijo que Argentina produce más de 50 millones de ton/año de soya y Brasil llegó a superar a EEUU rebasando las 100 millones de toneladas con promedios de 3 ton/ha -o más- gracias al pleno uso de la agrobiotecnología.
“Si nos ponemos al nivel de otros países, si nos dejan usar la misma tecnología que en países vecinos, homologándola para no perder más tiempo, y logramos un precio adecuado para la urea, podemos producir un millón más de toneladas de soya sin ampliar la frontera agrícola”, concluyó.
“Creo que ha llegado la hora de volcar en serio la mirada al sector agropecuario como punta de lanza para el crecimiento del país (…) la agropecuaria es el único sector cuyo crecimiento es sustentable y renovable cada año”, declaró a la prensa Richard Paz, Presidente de ANAPO.
La soya y derivados es el tercer renglón más importante de las exportaciones bolivianas, luego de los hidrocarburos y minerales (no renovables). Su aporte entre el 2000 y 2018 superó los 12.000 millones de dólares por 32 millones de toneladas exportadas.
¿Sabía que gracias a la biotecnología, en los últimos 6 años Paraguay exportó lo mismo que Bolivia en 19 años? ¿Hasta cuándo seguiremos admirando al Paraguay, cuando podemos hacer eso y más?
(*) Economista y Magíster en Comercio Internacional
Santa Cruz, 16 de enero de 2019