La Paz, 13 de noviembre (Urgentebo).- En la ciudad de La Paz, EPSAS hace conocer que el plan de racionamiento que puso esta semana en marcha no funciona, debido a que los vecinos acopiaron agua en exceso. Esa es la verdad de la empresa pública. No la única. Lejos de la urbe y cerca de los nevados andinos se llega a otra constatación. El agua se agota y, como los picos perdieron su manto blanco, el futuro de la provisión del agua se convierte en presente de triste incertidumbre.
Con pequeñas diferencias sobre el nivel del caudal, hay una realidad similar en las represas de Incachaca (camino a Yungas); Hampaturi (subiendo por Chicani) o Milluni (en el camino a Zongo). Hay cada vez menos agua y en la superficie, la tierra agrietada se extiende, por la fuerza del sol y la falta del líquido elemento. Junto a los pequeños espejos de agua, uno ve que las presas parecen gigantes sin sentido.
El semanario el Coaapdre estuvo esta semana en la represa de Incachaca y en las de Hampaturi, y es en éstas, donde la situación es dramática.
En Hampaturi (área rural del municipio de La Paz) hay dos represas, una más cerca de los picos y otra en las faldas los cerros. En ambas el nivel del agua es bajísimo. Según los reportes que tiene EPSAS, apena llega al 5% de su capacidad total. Y las fotos lo muestran así.
Hoy ambas están llenas de grietas, algunos sectores son charcos de agua y otros puntos con piedras lajas, que se deshacen a la menor presión. Y entre ambas, obreros de la empresa Tauro construyen una tercera represa, aunque por la actual situación, no se ve de dónde concentrará el caudal que proyecta contener. Por lo pronto, los mismos trabajadores beben agua que les lleva una cisterna.
Inca
haca está a media hora de La Paz. La represa fue diseñada para una capacidad de 5.2 millones de metros cúbicos de agua en 1990. Una de las represas de Hampaturi tiene una capacidad de 3.2 millones de metros cúbicos de agua y fue construida en 1945.Los niveles de agua bajaron desde mayo de esta gestión. Y hubo retraso en la época de lluvias, comenzó en enero, cuando estaba previsto que inicie en diciembre.
El 75% de la capacidad de las represas es alimentado por lluvias y el 25% por nevados. Hoy se carece de ambos factores.
La Paz vive por primera vez un plan de racionamiento de agua. El país atraviesa la peor temporada de sequía. Potosí, Tarija y Chuquisaca, también sufren de agua. Incluso en una comunidad rural de Cochabamba, niños clamaron en una oración pidiendo que llueva.
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