El canciller de Surinam Albert Ramdin fue elegido este lunes como el nuevo secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA) por aclamación en una asamblea general extraordinaria en Washington, el primer caribeño al mando de la organización que con la nueva gestión busca tener menos influencia de Estados Unidos y ser más “dialoguista” con países como Venezuela.
El diplomático, de 67 años, sucederá al uruguayo Luis Almagro, cuyo mandato finaliza el 25 de mayo, luego de una década en el cargo. Su mandato regirá hasta 2030.
El que era su único rival, el ministro de Exteriores de Paraguay, Rubén Ramírez Lezcano, afín al presidente norteamericano, Donald Trump, retiró su candidatura el pasado miércoles, después de que varios países, entre ellos Brasil y Uruguay, anunciaran en bloque su respaldo a Ramdin y se garantizaban así la mayoría.
La mayoría de los países miembros destaca de Ramdin su experiencia previa en la OEA y su capacidad para abrir una nueva etapa de diálogo tras los 10 años de mandato de Almagro, muy criticado por la izquierda regional debido a su alineamiento con Washington. "Probablemente la gestión de Albert Ramdin sea muy diferente a la de Almagro. No busca ser el protagonista del liderazgo de la OEA, sino correrse de ese lugar para devolverle a los Estados miembros la agenda y el poder de decisión. Es consciente de que su rol será dirigir y facilitar diálogos, y que la búsqueda de consensos será lo más necesario y, a la vez, lo más difícil en un escenario internacional hostil, que fragmenta e individualiza", explicó a Página/12 Julieta Heduvan, magíster en estudios latinoamericanos por la Universidad de Salamanca.