La Paz, 14 junio (Urgentebo).- Puedes saborear las gotas que sobresalen de las hojas por el rocío mañanero en los Yungas, admirar las increíbles y refrescantes aguas que brotan del Silala o escalar las cumbres espumosas y blancas de la cordillera de Los Andes, en La Paz.

 

Pero, no existe una experiencia cultural tan excitante como degustar de un exquisito vaso helado de cerveza en un día intenso, para relajar el cuerpo y compartir, en una mesa redonda, con tus amigos, a lado de una melódica guitarra y cantando las diversas cuecas de la región.

En una nación de solo 10 millones de personas, la cerveza se la identificó como la bebida principal que consume la población boliviana, según un estudio de Análisis de Mercado Bolivia, realizado en diciembre de 2012 por Captura Consulting y encargado por Fautapo y el BID-FOMIN.

Aunque Bolivia fue posicionada como una de las regiones con la mayor cantidad de consumidores de cerveza; la mayoría de estas personas aún no tienen conocimiento sobre la cultura que existe detrás de esta bebida milenaria  

Asimis

o, “la rubia” tiene una enorme variabilidad en torno, por ejemplo, a su ubicación geográfica, su color, sus ingredientes, su aroma y su elaboración, las cuales, guían el paladar de un amante de la cerveza a degustar esta exquisita bebida.

Entre esta clasificación, se encuentra la cerveza tipo Lager que data de mediados del siglo XIX y su nombre se debe al término alemán "lager" que significa almacenar. Esta bebida se la puede conseguir a través de una fermentación a baja temperatura, cuyo resultado, da una cerveza más suave y que debe ser conservada por lo menos tres meses en contenedores.

Además, esta bebida debe servirse fría y nunca tibia o, sino, jamás podrás disfrutar de su saborcillo ideal, ya que tiene mal sabor a temperatura ambiente. Su color, por lo general, es más claro, aunque hay algunas que tienen un tono dorado o amarillento e, incluso, oscuras y cobrizas.

Por otro lado, la cerveza Ale, originaria de los Países Bajos, se caracteriza por su forma de preparación, ya que requiere que la cebada sea fermentada a una temperatura elevada, entre 15° a 25° grados centígrados. Asimismo, esta bebida se destaca por su alta graduación alcohólica al igual que por su sabor amargo; por este motivo, se la debe servir tibia.

Otra de las destacadas en el mundo de las cervezas se encuentra la Pilsen, también llamada Pílsener o Pils. Esta bebida tiene un estilo de baja fermentación originaria de República Checa. Esta bebida se caracteriza por su color bastante claro y traslucido, que da como origen a la famosa “rubia”. Un líquido ligero, refrescante y con mucha espuma.