La primera fecha de las Eliminatorias Sudamericanas del Mundial 2026 será muy dura para Bolivia. Visitará al pentacampeón Brasil y luego recibirá al último rey, a Leo Messi y su corte de triunfadores. Los dos colosos del planeta podrán a prueba nuevamente al país, que, como ha ocurrido por muchos años, no pierde la esperanza de clasificar al torneo más importante. Sin embargo, ¿es posible que, en esta competición, la más dura a nivel de selecciones del mundo, la Verde tenga alguna opción?

O, por el contrario, ¿ocurrirá lo mismo que en pasadas versiones, cuando los bolivianos no tuvieron otra que ver el Mundial sin ser protagonistas? Treinta años después de la histórica clasificación al Mundial de Estados Unidos, los bolivianos empiezan a comentar sobre los dos primeros encuentros que disputará Bolivia, en especial, el del 12 de septiembre cuando recibirá a la flamante campeona del mundo: Argentina.

Y hay quienes irán al Hernando Siles atraídos por los alibicelestes. Sin embargo, también hay cada vez más personas que sostienen que, en esta versión, Bolivia tiene con qué hacer frente y que es posible soñar, gracias a la savia nueva en el fútbol nacional.

La carta de presentación de Gustavo Costas serán sus jóvenes figuras. Los laterales Roberto Carlos Fernández (24 años) y Diego Medina (21 años), el defensor Jairo Quinteros (22 años), y los mediocampistas Gabriel Villamil (22 años) y Miguel Terceros (19 años), entre otros, representan la sangre nueva de la Verde. En los últimos amistosos, ellos se han convertido en la emergente columna vertebral.

Fernández, que juega en Rusia; Medina de gran desempeño en Always Ready; Quinteros y Villamil que se destacan en Bolívar, tendrán el acompañamiento de los experimentados Marcelo Martins (36 años), Carlos Lampe (36 años) y Adrián Jusino (31 años). Ellos son base del equipo nacional que debutará de visitante ante Brasil el 8 de septiembre y recibirá el 12 a la albiceleste campeona en el estadio Hernando Siles.

“Estamos ingresando a una nueva generación de excelentes jugadores. Es posible que seamos testigos del surgimiento de una camada fresca de futbolistas. Nos encontramos en una posición en la que contamos con jugadores de calidad, incluyendo a algunos en el extranjero, que complementan al equipo”, describe Gonzalo Gorriti, periodista deportivo de larga trayectoria.

A fines de los años 90, la generación de oro de Carlos Borja, Vladimir Soria, Luis Cristaldo, Erwin Sánchez y Marco Etcheverry estuvo a un gol de clasificar a Italia 1990, pero tres años después esa generación logró el boleto a Estados Unidos 1994. Aquel grupo fue después subcampeón de la Copa América en 1997, pero desde esa década, la Selección sumó más tropiezos que éxitos.

La juventud en la verde

En las eliminatorias anteriores, la Selección, cuando estaba bajo la dirección técnica de Cesar Farías, atisbó una renovación de jugadores, que hoy tendrán su segunda eliminatoria. Fernández, Villamil, Ramiro Vaca, Leonardo Zabala, Jeyson Chura y Quinteros, entre otros, eran¿ regulares en las convocatorias. Ahora, Costas apuesta todas sus cartas a ellos. “Jugadores como Roberto Carlos Fernández, seguramente serán titulares. Han sido formados y guiados, por ejemplo, por Juan Carlos Arce (excapitán de la Selección), quien ya no estará en las Eliminatorias”, explica Sergio Apaza, director técnico nacional.

En las recientes convocatorias, Costas dio prioridada los jóvenes futbolistas y redujo el promedio de edad de los convocados a 25 años, cuando en la era de Farías, el promedio rondaba 26,8 años. Otra evidencia más de que el DT busca el recambio del combinado nacional. A principios de año, el entrenador comentó sobre la importancia de la renovación.

“Tenemos jugadores experimentados que deben guiar a los jóvenes. Siempre les brindaremos oportunidades y espacio a ellos. No tengo problemas en colocar en el terreno de juego a un chico de 18, 17 o 16 años si está en buena forma, pero deben demostrar que están listos para afrontar ese desafío”, dijo.

Sin embargo, el DT Apaza ve que aún deben ir “fogueándose” en la preparación. “No debemos depositar toda la responsabilidad de la victoria en los jóvenes. Son una esperanza, pero aún no una realidad completa”.

“Un equipo más organizado”

Ha pasado un año desde que Costas asumió el liderazgo técnico de la Selección. Desde entonces, dirigió cuatro partidos amistosos al frente del equipo; consiguió una victoria ante Arabia Saudita, un empate y tres derrotas. Anotó dos goles, mientras que el arco recibió cuatro.

La Selección disputará su último amistoso el domingo 27 de agosto ante Panamá en Cochabamba, será la última prueba antes de enfrentarse con Brasil. El excapitán y mundialista Carlos Borja, percibe que el actual equipo tiene una mejor organización. “Me parece que el plantel está más organizado y con un mayor equilibrio en el campo de juego.

Eso debe inspirar confianza, especialmente en el manejo del balón y aquello será crucial para tener más seguridad y un mejor rendimiento”. Gorriti ve que el actual DT va por buen camino. “Hay que ponderar el trabajo y excelente manejo técnico táctico que tiene el equipo de Costas, pero todo va a depender también de cómo llegue cada jugador a las Eliminatorias para lograr el engranaje colectivo”, subraya.

El técnico ya dio algunas pistas de que armará dos equipos, uno para los partidos en La Paz y otro para los encuentros fuera de casa. “Gustavo Costas la tiene clara y no duda, eso es bueno porque eso transmite al jugador. En el amistoso que Bolivia perdió 1-0 contra Ecuador en Estados Unidos, Gustavo Costas mostró para muchos un planteamiento táctico que pretende emplear cuando juegue de visitante y cuando se jugó contra Chile en Santa Cruz (0-0), el esquema que busca consolidar para los cotejos en el Siles”, dice Apaza.

Costas corroboró luego de enfrentar a los chilenos. “Nuestro objetivo es construir un equipo que se adapte a cualquier lugar, ya sea en La Paz o en otros lugares”.

¿Hay potencial?

Aunque la Verde tiene poco para elegir a diferencia de otras selecciones, existen sectores en el campo de juego donde muestra mayor potencial. En el arco, por ejemplo,“tenemos dos buenos arqueros”, dice Costas. El puesto estará peleado entre Carlos Lampe (Bolívar) y Guillermo Viscarra (The Strongest). La tercera plaza se disputarán Bruno Poveda (Wilstermann) y Rubén Cordano (Bolívar).

En la defensa, hay posiciones fijas, pero con pocas alternativas de recambio. En el centro de la zaga Adrián Jusino (The Strongest) es el más experimentado y probablemente será acompañado por Jairo Quinteros (Bolívar); en los laterales (derecho), la firme apuesta es Diego Medina; el veterano Diego Bejarano es la otra opción.

En el lateral izquierdo, Fernández, fichado por el FC Baltika de Rusia, también tiene asegurado su lugar, la otra alternativa es Carlos Roca de The Strongest. En el mediocampo, hay opciones: Gabriel Villamil (Bolívar) es una de las piezas claves junto a Danny Bejarano (Nea Salamina Famagusta FC de Chipre), Boris Céspedes (Yverdon-Sport FC de Suiza) y Miguel Terceros (Santos de Brasil).

En el medio el titular fue el argentino nacionalizado boliviano Luciano Ursino (The Strongest). La delantera es el punto más delicado de la Selección, con solo Marcelo Martins (Independiente del Valle de Ecuador) como referencia. Es casi seguro sea titular y podría estar acompañado por Carmelo Algarañaz o Lucas Chávez (ambos de Bolívar); o Chura (The Strongest).

“Hay que seguir soñando”

El nuevo formato de la Copa Mundial de la FIFA cambió la perspectiva. El torneo que se llevará a cabo en 2026 en Estados Unidos, Canadá y México contará con 16 equipos más que en Qatar 2022, cada confederación tiene más plazas. En el caso de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) aumentará de 4,5 a 6,5 los cupos. Seis de ellos tendrán cupos directos, mientras que el medio boleto restante irá a una repesca. Es importante recordar que hay 10 selecciones sudamericanas en búsqueda de la clasificación al Mundial.

En este escenario, las posibilidades de clasificación han aumentado, pero no debe dejar de considerarse que las Eliminatorias en Sudamérica son durísimas. “La Selección debe ser más competitiva para lograr la clasificación. Ahora las posibilidades son mayores. No lograrlo sería realmente un rendimiento deficiente”, señala Borja.

Las Eliminatorias Sudamericanas son consideradas las más difíciles del mundo, porque compiten el pentacampeón Brasil, el tricampeón Argentina y el bicampeón Uruguay, los tres infaltables a citas mundialistas. A ello se suma Ecuador que para muchos es firme candidato a las cuatro plazas, pero por las otras dos casillas lucharán: Chile, Colombia, Perú, Paraguay, Venezuela y Bolivia.

Pese a todo, Borja sostiene que siempre se debe soñar. “Siempre debemos soñar con la clasificación, sin importar si tenemos o no figuras destacadas”, destaca. Gorriti también se muestra optimista considerando las capacidades de los jugadores disponibles. “A diferencia de eliminatorias anteriores, creo que esta vez, existe la posibilidad de lograr una clasificación”, comenta. Bolivia se prepara para un gran desafío, pero no insuperable para volver a un Mundial como en 1994. “Siempre debemos soñar, pero para hacer realidad esos sueños, debemos trabajar arduamente”, dice Apaza.

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