La Paz, 21 de abril (Urgentebo.com).-Raiza Choque Cruz, Santiago Condori Barón y Cristian Limache Chambilla, estudiantes de la Universidad Pública de El Alto (UPEA), iniciaron un proyecto con el fin de contrarrestar la sequía en las regiones donde hay déficit de agua. Se trata del “atrapaniebla” que sirve para reciclar agua de la humedad y la neblina.
“Esto se hizo con el fin de aplicarlo en las áreas rurales, su fabricación no es costosa ni se necesita de mucha experiencia, con un manual básico se lo puede realizar”, dice Raiza Choque, de 20 años, estudiante de la carrera de Ingeniería Ambiental de la UPEA.
Los tres estudiantes construyeron un “atrapaniebla” en forma de cubo que captura la humedad que circula en la dirección del viento. Usan mallas Rachell y tubos PVC para atrapar la neblina. Consiste en que las redes atrapen y retengan la neblina o la humedad. Luego se condensan y se escurren por los tubos conectados a un recipiente.
“En la neblina se encuentra pequeñas gotitas de aguas en suspensión, éstas se van adhiriendo a la malla y van escurriéndose”, explicó en la exposición que realizó ante el público el estudiante Santiago Condori Barón.
La neblina es un hidrometeoro, que se compone de gotas de agua muy pequeñas, de entre 50 y 200 micrómetros de diámetro, que están suspendidas en el aire.
Los estudiantes analizaron captar agua con el modelo laminar, que consiste en la extensión de la malla en un solo sentido. Concluyeron que no era tan factible como el método cúbico, porque el modelo laminar alguien debía moverlo al lado de la dirección del viento.
Choque estacó que la construcción del “atrapaniebla” es económica. “No pasa de 150 bolivianos se necesita tubos y básicamente tres metros de malla que tiene un costo de 90 bolivianos”, indicó.
El experimento se aplicó en la casa de cada uno de los estudiantes, donde llegaron a captar, en promedio, 15 litros de agua al día, con un “atrapaniebla” cuyo tamaño es de un metro por un metro.
Los au
El agua que se llega a reciclar a través de este método se puede consumir con la debida potabilización. Según los estudiantes de ingeniería Ambiental, la neblina puede ser consumida en Bolivia, porque aún no está contaminada, como en el caso de Japón, donde el agua solo es para la limpieza.
El experimento no solo capta agua de la neblina, sino también de la humedad en los lugares cálidos. “Cuando cae la noche siempre quedan gotas en suspensión, éstas se irán adhiriendo al igual que la neblina aun que la cantidad será menor”, explica Choque.
Este modelo ya se implementó en Perú, en uno de sus desiertos. Se instaló en lugares donde hay humedad y mucha neblina.
El plan de los estudiantes es ejecutar el proyecto en zonas rurales donde escasea el agua, como en el Chaco y en algunos municipios del departamento de Potosí con el fin de ayudar a mitigar la falta de agua.
“Cada casa puede tener su Atrapanieblas. Queremos ayudar a fabricarlos, no queremos que la propuesta se quede como un simple proyecto queremos que se aplique”, se propone Condori.
