Gustavo Vargas Arias confesó este domingo que es el responsable del asesinato múltiple de una familia en Sao Paulo, hecho que ocurrió a fines del año pasado. Presentado ante los medios de comunicación, el criminal dijo que mató a la pareja porque el hombre le debía dinero y que dio fin con la vida del niño porque no sabía qué hacer con él.
Fue capturado ayer sábado en la zona Villa 1ro. de Mayo, de la ciudad de Santa Cruz. En sus declaraciones a la Policía Boliviana, confesó haber descuartizado a una familia de bolivianos la noche de Navidad de 2018.
"Me debía dinero. Prometió que me iba a pagar pero no cumplió", dijo Vargas Arias, quien fue presentado a los medios de comunicación.
"Nadie sabía nada de lo que hice, Mi esposa no sabía nada”, respondió ante la consulta de quiénes conocían del crimen ocurrido en un taller de textiles en Sao Paulo.
"Al niño lo maté dos días después de haber matado a sus padres. Le dije que sus padres se habían ido al mercado a comprar. No sabía qué hacer, lloraba mucho y preguntaba por sus padres", confesó.
Hace un mes, exactamente el 9 de enero, los cuerpos de tres miembros de una familia boliviana reportada como desaparecida desde diciembre del 2018, fueron hallados descuartizados y empaquetados en tres maletas dentro de una casa en la zona metropolitana de Sao Paulo, Brasil.
La familia fue reportada como desaparecida el 23 de diciembre.
Los cuerpos llegaron Bolivia el pasado 15 de enero. Irma y Gian fueron enterrados en La Paz, mientras que Jesús Reynaldo fue sepultado en el municipio de Achacachi.
