8 de enero (Infobae)- Nicolás Maduro anunció este martes la activación de los llamados “órganos de dirección integral” (ODIS), una estructura que centraliza el poder político, las Fuerzas Armadas, la Milicia Nacional Bolivariana, cuerpos policiales y grupos comunitarios, bajo el pretexto de “defender la paz” en los días previos al próximo 10 de enero, fecha en la que pretende su jura ilegítima.
En un acto celebrado en el Palacio de Miraflores, Maduro, vistiendo un uniforme militar camuflado en un claro intento de proyectar autoridad, anunció la creación de estas estructuras mediante decreto.
Además, se autoproclamó comandante supremo de esta fusión político-militar, que tiene como objetivo principal reforzar su régimen autoritario.
Bajo el pretexto de una iniciativa de defensa integral, el dictador de Caracas describió a las ODIS como un “órgano superior” que operará en todos los niveles de la administración pública y comunitaria.
En la práctica, esto se traduce en un mecanismo de control territorial absoluto, diseñado para someter a la población y sofocar cualquier expresión de disidencia antes del 10 de enero, fecha en la que el presidente electo Edmundo González Urrutia debe asumir el mando, tras haber obtenido más del 60% de los votos el pasado 28 de julio, según las actas del Consejo Nacional Electoral (CNE) publicadas por la oposición.
“La activación de las ODIS garantizará la victoria ejemplar de la paz”, aseguró Maduro, en un intento de silenciar por la fuerza a quienes cuestionen su autoridad.
Según lo anunciado, estas agrupaciones estarán operativas en los 355 municipios del país y en miles de comunidades, extendiendo una red de vigilancia y represión sin precedentes.
El evento estuvo acompañado por una demostración de fuerza con la participación de cientos de milicianos armados y trabajadores de empresas estatales, obligados a marchar desde el Cuartel de la Montaña 4F, donde reposan los restos del ex dictador Hugo Chávez, hasta Miraflores.
La implementación de las ODIS se produce en un contexto de creciente represión, caracterizado por la persecución sistemática de opositores, el encarcelamiento de activistas y la desaparición forzada de figuras clave. Entre los casos más recientes destaca el de Enrique Márquez, ex vicepresidente del Consejo Nacional Electoral, cuyo paradero sigue siendo desconocido.