Diciembre 18, 2024 -H-

Por qué Corpus Christi se celebra siempre los jueves

La primera vez que se celebró la fiesta fue en 1246, cuando la religiosa Juliana de Cornillon promueve la idea de celebrar una festividad en honor al Cuerpo y la Sangre de Cristo presente en la Eucaristía.


Miércoles 14 de Junio de 2017, 1:00pm






-

La Paz, 14 de junio (Urgentebo) .- Este jueves la población boliviana que profesa el catolicismo celebra la fiesta del “Corpus Christi”, que se conmemora 60 días después de la resurrección.

“Es una fiesta de la Iglesia católica destinada a celebrar la Eucaristía. Su principal finalidad es aumentar la fe en la presencia real de Jesucristo en el Santísimo Sacramento, ocurre el jueves posterior a la solemnidad de la Santísima Trinidad, que a su vez tiene lugar el domingo siguiente a Pentecostés. Es decir, el Corpus Christi se celebra 60 días después del Domingo de Resurrección”, según explicó un sacerdote al periódico digital Urgentebo.com.

Según los católicos, la celebración representa la institución de la eucaristía que se desarrolló el Jueves Santo, durante la última cena, cuando Jesús convirtió el pan y el vino en su cuerpo, por eso hoy en día se realizan misas, liturgias de consagración del pan (hostia) y el vino, es decir el cuerpo y la sangre de Jesucristo.

Por eso la fiesta se celebra siempre en jueves. El calendario gregoriano hizo que el 2015, esta fiesta se celebre el jueves 4 de junio, el 2016, fue el jueves 26 de mayo y el 2018 sera el jueves 31 de mayo.

La primera vez que se celebró la fiesta fue en 1246, cuando la religiosa Juliana de Cornillon promueve la idea de celebrar una festividad en honor al Cuerpo y la Sangre de Cristo presente en la Eucaristía.

En el siglo XIII, el sacerdote alemán, Pedro de Praga, se detuvo en la ciudad italiana de Bolsena, mientras realizaba una peregrinación a Roma. Era un sacerdote piadoso, pero dudaba en ese momento de la presencia real de Cristo en la Hostia consagrada. Cuando estaba celebrando la Misa junto a la tumba de Santa Cristina, al pronunciar las palabras de la Consagración, comenzó a salir sangre de la Hostia consagrada y salpicó sus manos, el altar y el corporal.

El sacerdote estaba confundido. Quiso esconder la sangre, pero no pudo. Interrumpió la Misa y fue a Orvieto, lugar donde residía el Papa Urbano IV.

El Papa escuchó al sacerdote y mandó a unos emisarios a hacer una investigación. Ante la certeza del acontecimiento, el Papa ordenó al obispo de la diócesis llevar a Orvieto la Hostia y el corporal con las gotas de sangre.Oficialmente fue instituida el 8 de septiembre de 1264 por el papa Urbano IV, mediante la bula Transiturus hoc mundo.

A Santo Tomás de Aquino se le encargó preparar los textos para el Oficio y Misa propia del día, que incluye himnos y secuencias, como Pange Lingua (y su parte final Tantum Ergo), Lauda Sion, Panis angelicus, Adoro te devote o Verbum Supernum Prodiens.

.