23 de marzo (Urgente.bo).- Ante la emergencia generada por el elevado número de casos confirmados de coronavirus, entre transmisión importada y local, el gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas anunció el incremento de 500 camas y 12 unidades de terapia intensiva para la atención de pacientes con coronavirus. Asimismo, anunció que pidió organizar un equipo de voluntario para asistir a las personas de la tercera edad que viven solos.
“Pretendemos ampliar las camas de atención para afectados por el virus, este plan estamos trabajándolo en conjunto con el Gobierno nacional y con los gobierno municipales. Se incorporarán 500 camas adicionales, en el caso de terapias intensivas para enfermos críticos tenemos actualmente, entre el sector público, la seguridad social y clínica privadas, 213 unidades de terapia intensiva, 25 de las cuales tenemos a disposición del Covid-19. Estamos agilizando la habilitación de 12 unidades de terapia intensiva adicional en el hospital de Montero y el Gobierno nacional ha comprometido una importante cantidad de unidades de terapia intensiva de la que se está adquiriendo nacionalmente”, informó.
Estas declaraciones surgen luego que el secretario de Salud de la Gobernación, Óscar Urenda, advirtiera la noche del domingo que “esto es la calma y se viene la tormenta” y que se vienen miles de casos de infectados.
“Quiero advertirles que esto es la calma antes de la tormenta, viene la tormenta y todos debemos estar preocupados y asustados. Llegará el momento en que lo que estamos hablando será pura estadística, cuando estemos hablando de centenares o miles de casos internados, cuando estemos buscando hoteles o lugares donde internar”, dijo Urenda.
Costas anunció que junto a Urenda y el director del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Marcelo Ríos, inspeccionarán las instalaciones de la Fexpo para instalar un campamento sanitario para la atención de pacientes.
Actualmente Santa Cruz registra 15 casos de coronavirus, entre transmisiones locales e importadas. Costas aclaró que el departamento cruceño ya se encuentra en la fase de contagio local y se aproxima al contagio comunitario y la única forma de frenar la expansión es que la población se quede en casa.
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