La Paz, 21 de enero ( de Ximena Flores para Urgente.bo).- Las ventas de sus joyas en ferias no iban bien, toda la inversión se perdía, sin que retorne la ganancia, “pagaba 200 por el espacio, gastaba en el transporte y demás, y vendía 10 Bolivianos, realmente me iba muy mal”, dice Edith Irene Díez Tirado, más conocida en el mundo artístico y artesanal como Edirene, la mujer que a sus 73 años es una de las youtubers más importantes de Bolivia.
Con más de 180 mil seguidores y alrededor de 17 millones de visualizaciones (¡sí, millones!), esta maestra jubilada es, de lejos, una de las bolivianas más influyentes en el mundo digital. Su canal de la famosa plataforma de videos YouTube “Bisutereando con Edirene” proporciona tutoriales de joyas artesanales mediante clases explicativas y de fácil comprensión, que ya suman 230 lecciones.
Todo comenzó a mediados del 2016, cuando a raíz de esa baja en ventas tuvo que buscar nuevas opciones para conseguir ingresos, “Fernando, mi hijo menor, me animó a abrir el canal, pero no sabíamos nada de cómo se manejaba eso, ni cómo hacer videos y mucho menos cómo generar dinero, pero él insistió y estudió las maneras” comenta, y fue de ese modo que filmó su primera lección, con una cámara digital, muchos nervios y apenas cinco suscriptores.
El mecanismo de la plataforma YouTube paga determinados montos de dinero según la cantidad de visualizaciones y suscripciones, dos elementos no siempre fáciles de conseguir puesto que se debe considerar la calidad de los videos, el tiempo de preparación de los mismos, su producción y edición, y por supuesto, el contenido del mensaje que debe ser del agrado de la gente, “sólo teníamos una cámara fija, no se movía para nada, y mi hijo se ocupaba de filmar y luego editar en la computadora con los básicos conocimientos que tenía, luego la cámara se arruinó y acudimos al celular, pero fue mejor porque ahora ya manejamos mejor la imagen, enfoques, acercamientos y demás”, nos cuenta la maestra de primaria que confiesa que al no tener luces profesionales simplemente decidieron filmar con la luz del sol, un gran acierto para poder ver con claridad y detalle cada una de sus lecciones.
Los tutoriales de su canal enseñan a hacer desde aretes sencillos, hasta complejos conjuntos donde la imaginación y el conocimiento de Edirene, explotan a favor de su audiencia que suele ser variada en edad, nacionalidad y género, “una de mis máximas satisfacciones es enseñar algo que le sirve a la gente, principalmente a las mujeres, recuerdo que una vez me escribió una señora contándome que era discapacitada y me dijo que gracias a mis videos ella hace y vende joyas, y tiene para sus medicamentos” cuenta emocionada con su acento cruceño.
De igual modo se llena de orgullo cuando recuerda el día en que YouTube le mandó el “Botón de Plata”, un reconocimiento a sus youtubers cuando logran sus primeros 100 mil suscriptores. “Estaba caminando cerca de mi casa, sin saber que ya había llegado el Botón de Plata, cuando vi el carro del transporte yo ya sabía qué era, me puse a llorar en plena calle, hasta el cartero me dijo que qué me pasaba, sin poder decir palabra recibí el paquete emocionada”, dice la profesora que también se dedica al canto como una de sus pasiones.
Ella nos revela que el secreto es la constancia, dado que suben dos videos a la semana de manera puntual y de ese modo ha conseguido la atención del público de todo el mundo, cosa que la ha obligado a aprender a usar el traductor de su celular para saber qué dicen los comentarios en inglés, chino o árabe y responderlos. Igualmente nos cuenta que más de una vez se ha tenido que dar modos para que sus videos salgan con la calidad deseada, porque no cuenta con equipos profesionales para aquello, “con algo de esfuerzo y empeño se logran los videos, en principio nos decían que no funcionaría, pero ahora se sorprenden de cómo el canal va creciendo por mes que pasa”, nos cuenta Edirene al tiempo de reflexionar sobre las razones a las que llevan a gente joven a no progresar, “es flojera, los jóvenes deben dejar la flojera”, sentencia convencida.
Ella sueña con ver crecer aún más su canal y llegar a más personas. “Tengo 73 años, nunca miento sobre mi edad porque es mejor que me digan ´no aparentas los años que tienes´ (ríe), así que es mejor decirlo”, concluye la youtuber más famosa de Bolivia.
Ederine tiene gran vitalidad. Ser youtuber es una extensión de otras de sus pasiones, la del canto. Gracias a la música también ha reafirmado sus lazos con sus familiares, con quienes no duda en interpretar temas.
