16 de septiembre (Soledad Mena-Urgentebo).- Un cuarto y una cama con colchón de paja, es lo que ofrecen los alojamientos del centro de la ciudad de La Paz a los estudiantes de las unidades educativas para que puedan beber sin restricciones y hasta la hora que quieran.
La división de Trata y Tráfico de personas, de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de La Paz, identificó que los alojamientos se han convertido en bares cerrados para escolares y personas adultas.
“Encontramos a estudiantes escolares, hemos encontrado a personas adultas, entre 18 a 25 años de edad, donde solo se dedican al consumo de bebidas alcohólicas”, informó Gaby Coca, jefa de la división de Trata y Tráfico, FELCC La Paz.
Se identificó a los alojamientos ubicados en la calle Viacha alquilando sus cuartos a los estudiantes a costo de cinco bolivianos por media hora. Los muchachos ingresan a la pieza con sus bebidas alcohólicas. Después de un tiempo, salen en completo estado de ebriedad o se quedan en el lugar inconscientes.
“En las intervenciones los encontramos inconscientes, ebrios, es decir en una situación alarmante más aún en su calidad de estudiantes cuando deberían estar haciendo otra actividad a esa hora del día”, dijo Coca.
Los propietarios de estas actividades económicas han fortalecido sus medidas de seguridad que impiden los controles y las intervenciones de la Policía.
Muchos de estos ambientes ya cuentan con clausura definitiva pero continúan con sus actividades de manera ilegal.
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