17 de octubre (Urgente.bo)- Dos eran los puntos anunciados por representantes de diferentes organizaciones sociales para el Cabildo convocado por el Pacto de Unidad: la recuperación del Instrumento Polìtico Por la Soberanía de los Pueblos-Movimiento Al Socialismo (IPSP-MAS) y el fortalecimiento de la agenda de octubre de 2003, sin embargo poco o nada se hizo o se dijo sobre el segundo punto, más que el minuto de silencio, que dio inicio a un encuentro político.
Al promediar las 10:00 de la mañana, dirigentes y gente de base fueron llegando con bandera en mano, tricolor, wiphala, el emblema de su ciudad, o del propio partido político, todos guiados a un mismo punto, el palco oficial instalado un dia antes en el puente distribuidor de la Ceja.
“¡Que viva Lucho Arce!”, “¡que viva el hermano David!”, eran los vítores que animaban a las bases, quienes no dudaron en lucir la vestimenta típica de su región, potosinos de chulo alto, tarijeñas de manta blanca, guardatojos complementados con el amarró de coca, sin poder faltar el sombrero de sao y los ponchos rojos, con el carácter tosco que los caracteriza.
El mediodía estaba a punto de llegar, con un sol despiadado, que no permitía ni mirarlo de reojo, momento crucial para las vendedoras, quienes aprovecharon en ofrecer sombrillas, helados, gorras, refrescos, bebidas energizantes y algo de comida para aguardar el inicio del evento.
“Queremos dar a conocer nuestras demandas”, “ya no queremos la intromisión del Expresidente”, formaban parte de las demandas de la gente que poco a poco se aproximaban al punto final, el palco del puente distribuidor, para por lo menos ver de cerca del presidente Luis Arce y el vicepresidente David Choquehuanca.
Eran las 13.00 horas y ya se notaba la fatiga de las organizaciones sociales apostadas alrededor del círculo de seguridad, sin acceso a ningún alimento ni bebida, resguardado tanto por efectivos policiales como la policía sindical que con chicote en mano no permitía el ingreso de más personas.
Frases como “quiere pasar para la foto”, “el solito quiere brillar”, “no sabía que había militantes de primera y militantes de segunda”, expresaban la molestia de algunos dirigentes porque algunos de sus compañeros querían ingresar al palco oficial fuertemente resguardado.
div class="media media-element-container media-default">En las avenidas principales, 6 de marzo, Juan Pablo II y Peaje, grupos autóctonos realizaban sus interpretaciones y bailaban en círculo, mientras en el palco amenizaban diferentes grupos y artistas folclóricos, como Rijchari, Awatiñas, y Arawi.
Al promediar las 14 horas, empezaba la cuenta regresiva para el acto principal, mientras el sol se opacaba, acompañado de un frío estremecedor; pequeñas gotas de lluvia, casi invisibles, anunciaban el inicio del evento esperado hasta por días, ya que algunas organizaciones sociales como Pando viajaron hasta tres días, otros de Santa Cruz incluso no llegaron debido a percances en la carretera.
Más de cinco horas de espera, en medio de cambios extremos de clima, como caracteriza la ciudad de El Alto, finalmente dieron paso al acto principal del Cabildo con la participación de más de una decena de dirigentes y representantes en el palco oficial y miles de personas apostadas alrededor de las principales vías que pasan por el puente distribuidor.
“El instrumento político del MAS IPSP es del pueblo”, “te has apartado de tu pueblo”, “tenemos el mandato de desconocer el congreso de Lauca Ñ”, “las organizaciones sociales se merecen el respeto de las autoridades”, fueron parte del discurso caldeado de los dirigentes del Pacto de Unidad que apuntaban a consolidar el liderazgo de Luis Arce y al desconocimiento a las acciones impulsadas por el ala evista.
“Se va pedir acciones concretas para fortalecer la agenda de la agenda de Octubre de 2003”, habían anunciado algunos, pero solo se rememoró lo que es de conocimiento general para la población boliviana, siendo la parte màs relevante, “el minuto de silencio”, un minuto de silencio para expresar “luto y condolencia”, sin presencia de las víctimas de los hechos luctuosos, con un expresidente que afirmó horas antes, “el país ha vivido dos décadas de ilusiones traicionadas”.