Durante la pandemia, muchas bolivianas y bolivianos se dieron cuenta de la importancia de tener una reserva económica para los “momentos difíciles”. Sus ahorros representaron una tabla de salvación en medio de la crisis y les permitieron una recuperación económica más rápida que la que tuvieron aquellos que no tenían nada guardado.
“El ahorro permite concretar sueños, pero también es una garantía de tranquilidad en los tiempos difíciles. Preservar parte de nuestro patrimonio no solamente nos permite estar seguros frente a una contingencia como la que todavía estamos enfrentando en el mundo, también ayuda en mucho al desarrollo de la economía de un país”, explica José Luis Zavala subgerente nacional de Marketing y Responsabilidad Social Empresarial de BancoSol.
Este sábado 31 de octubre se celebra, como desde hace 98 años, el Día Mundial de Ahorro, una jornada para reflexionar sobre esta práctica y sus beneficios instituida en 1924 cuando se reunieron en Milán (Italia) delegados de la mayor parte de los países para establecer acuerdos básicos sobre los sitemas y la legislación del ahorro en el mundo.
“Como para todos los bancos, para BancoSol las captaciones provenientes de los ahorros del público son muy importantes, ya que son la fuente principal de fondeo de BancoSol, sin estos fondos, no podríamos otorgar créditos que a su vez son los que dinamizan los pequeños y medianos emprendimientos de Bolivia”, detalla Zavala.
Un aporte de BancoSol para celebrar el Día Mundial del Ahorro, son los siguientes consejos:
- AHORRA CADA MES. No importa si al principio sólo puedes reservar un pequeño monto, lo esencial es que seas constante y que generes el hábito de ahorrar.
- NO AHORRES LO QUE TE SOBRA. Una idea equivocada sobre el ahorro es poner en el banco aquello que te sobra en el mes; al contrario, lo que debes hacer es destinar un monto al ahorro y gastar lo que te queda.
- ELIGE BIEN. Dos condiciones esenciales que debe tener la institución donde decidas depositar tus ahorros son: que sea segura y que pague un buen interés, en ese orden, ya que muchas veces, tentados por un interés elevado, confiamos nuestro dinero a una institución no muy seria que puede desaparecer en cualquier momento junto a nuestro dinero.
- ANOTA TUS GASTOS. El llevar un registro minucioso de todo lo que gastamos nos hará dar cuenta que, a veces, tiramos el dinero en cosas que realmente no necesitamos. Por ejemplo, si todos los meses terminas con muchos megas de saldo en el celular, tal vez deberías cambiarte a un plan más económico, o si usas un servicio pre pago, tal vez te des cuenta que gastas más comprando tarjetas que suscribiéndote a un plan pos pago. Así poner en el ahorro la diferencia a favor.
- PONTE UNA META: Una buena motivación para ahorrar es visualizar la recompensa. Por ejemplo: voy a ahorrar para comprar en cuatro meses el ansío. Tal vez en los cuatro meses te des cuenta que no necesitas darte ese capricho, pero mientras tanto ya cuentas con el dinero para una contingencia o la base para una meta más grande.