La salud del papa Francisco sufrió este viernes un empeoramiento "repentino", debido a una nueva crisis respiratoria. Así lo informó la Santa Sede.
Francisco tuvo una crisis "aislada" de broncospasmo y un "repentino" empeoramiento de su cuadro clínico respiratorio, aunque ha respondido "bien" a la terapia, reza el parte médico oficial.
El Papa lleva dos semanas internado en el hospital Gemelli, de Roma. En los últimos días, su situación había mejorado.
“El papa durmió bien durante la noche y ahora está descansando”, dijo el Vaticano la mañana del jueves en su última actualización sobre la salud del pontífice de 88 años.
Francisco es vulnerable a las infecciones respiratorias. De joven, sufrió un grave ataque de neumonía que le llevó a la extirpación de parte de un pulmón.
En 2021, los médicos también le extirparon quirúrgicamente parte del colon en relación con una diverticulitis, que puede causar inflamación o infección del colon. En 2023 fue hospitalizado por una bronquitis y en los últimos meses ha sufrido dos caídas en las que se magulló la barbilla y se lastimó el brazo, que fue colocado en cabestrillo.
