El bonito discurso del litio contrasta con su dura realidad
Hasta ahora no hay un solo contrato validado por el legislativo. Tampoco hay una normativa definida y el 2025 como año del litio está descartado
La mitad de los refugiados del mundo son niños y su destino puede ser la muerte ahogados, desnutridos, caer en una red de tratas o entrar en una espiral de abusos de todo tipo. Dos imágenes conmocionaron al mundo. La de Aylan muerto en una playa como si estuviera dormido y la de Omran Daqneesh, sentado, con la mirada perdida y la casa ensangrentada tras un bombardeo en Alepo.
Miércoles 7 de Septiembre de 2016, 9:30am
Madrid, 07 de septiembre (La Información).- La mitad de los refugiados del mundo son niños y su destino puede ser la muerte ahogados, desnutridos, caer en una red de tratas o entrar en una espiral de abusos de todo tipo. Dos imágenes conmocionaron al mundo. La de Aylan muerto en una playa como si estuviera dormido y la de Omran Daqneesh, sentado, con la mirada perdida y la casa ensangrentada tras un bombardeo en Alepo.
Unos 50 millones de niños en el mundo viven fuera de sus lugares de origen, de los cuales 28 millones han sido forzados a huir de sus hogares por los conflictos y la violencia de la que no son responsables. Otros millones más han tenido que migrar, solos o con sus familias, con la esperanza de encontrar una vida mejor y más segura.
Traumatizados a menudo por los conflictos y la violencia de la que huyen, estos niños tienen que enfrentarse a otros peligros en el camino, entre ellos el riesgo de ahogarse en las travesías por mar, de sufrir desnutrición y deshidratación, o de ser víctimas de la trata, de secuestros, violaciones e incluso de asesinatos. En los países que atraviesan y en los lugares de destino son, con frecuencia, víctimas de xenofobia y discriminación.
Un nuevo informe publicado hoy por UNICEF, Desarraigados: Una crisis creciente para los niños refugiados y migrantes , presenta nuevos datos que describen un panorama desolador sobre la vida y la situación en la que se encuentran millones de niños y sus familias afectados por conflictos violentos y otras crisis que los obligan a arriesgar sus vidas huyendo antes que permanecer en sus lugares de origen.
“Las impactantes imágenes de niños, como la del pequeño Aylan Kurdi, que apareció en una playa después de ahogarse en el mar, o de la cara atónita y sangrante de Omran Daqneesh, sentado en una ambulancia después de que su casa resultara destruida, han conmocionado al mundo”, dijo el director ejecutivo de UNICEF, Anthony Lake. “Pero cada imagen, cada niña o niño, representa a muchos millones más que están en peligro y esto exige que nuestra conmoción por esos casos concretos se traduzca en acciones en favor de todos los niños”.
El padre de Aylan denuncia que la foto de su hijo no sirvió
De hecho, el padre de Aylan lamentó esta misma semana que los muertos en el mar "continúan" pero que "nadie hace nada" en el diario alemán Bild. "Después de la muerte de mi familia, los políticos dijeron: '¡Nunca más!'", recuerda Abdulá Kurdi, que además de Aylan, de 3 años, perdió a su mujer Rehab, de 35 años, y a su hijo mayor Galip, de 5 años, ahogados frente a las costas turcas cuando su embarcación se hundió.
"Todos querían hacer algo como fuera tras la foto que tanto les había conmocionado", la del niño muerto tendido en el suelo en la playa de Bodrum, insiste este hombre de 41 años.
"¿Pero qué pasa ahora? Los muertos continúan y nadie hace nada", añade Abdulá Kurdi, cuya familia está enterrada en Kobané, una ciudad siria cerca de la frontera turca.
No lamenta sin embargo la mediatización de la foto de su hijo porque considera que "una cosa así debe mostrarse para que la gente vea claramente lo que pasa (...). "El horror en Siria tiene que terminar. Las tragedias del exilio también", concluye.
Desarraigados muestra que los niños representan un porcentaje desproporcionado y creciente de todas las personas que han buscado refugio fuera de sus lugares de nacimiento: aunque representan un tercio de la población mundial, constituyen cerca de la mitad de todos los refugiados. En 2015, alrededor del 45% de todos los niños refugiados bajo protección de ACNUR procedían de Siria y Afganistán.
De hecho, 28 millones de niños han sido expulsados de sus hogares por la violencia y los conflictos dentro de sus países y fuera de sus fronteras. De ellos, 10 millones de niños son refugiados, un millón son solicitantes de asilo cuyo estatus aún no ha sido determinado, y unos 17 millones han sido desplazados dentro de sus propios países. Todos ellos tienen una necesidad extrema de recibir ayuda humanitaria y acceso a servicios básicos.
Cada vez hay más niños que están cruzando las fronteras solos. En 2015, más de 100.000 menores no acompañados solicitaron asilo en 78 países, el triple que en 2014. Los niños no acompañados están más expuestos a sufrir explotación y abusos por parte de contrabandistas y traficantes de personas.
En todo el mundo, unos 20 millones niños y niñas migrantes han dejado sus hogares por distintas razones, incluyendo la pobreza extrema o la violencia. Muchos corren un peligro real de sufrir abusos o de ser detenidos porque no tienen ninguna documentación, porque su estatus legal es incierto y, por lo tanto, no hay un seguimiento ni monitoreo sistemático sobre su bienestar. Son los niños que nadie detecta.
Turquía, la cuna del mayor número de niños refugiados
Según Desarraigados, Turquía alberga el mayor número de refugiados recientes y posiblemente el mayor número de niños refugiados en el mundo. En relación a su población, el Líbano acoge al mayor número de refugiados, donde aproximadamente 1 de cada 5 personas es un refugiado.
En comparación, hay aproximadamente un refugiado por cada 530 personas en el Reino Unido y uno por cada 1.200 en los Estados Unidos. En España, hay un refugiado por cada 7.739 personas. Si se consideran los países de acogida de refugiados por su nivel de ingreso, sin embargo, la República Democrática del Congo, Etiopía y Pakistán albergan la mayor concentración de refugiados.
“No nos vamos a rendir hasta que cada niño tenga una oportunidad justa. Huyen de la violencia y se ven forzados a abandonar sus hogares pero, lleguen a Líbano o a cualquier otro lugar del mundo, ante todo, son niños”, asegura Pau Gasol, embajador de UNICEF Comité Español.
El informe sostiene que en aquellos lugares donde hay rutas seguras y legales la migración puede ofrecer oportunidades para los niños que migran y las comunidades a las que se unen. Un análisis del impacto de la migración en los países de ingresos altos encontró que las contribuciones de los migrantes en impuestos y contribuciones sociales fueron mayores que la ayuda que recibieron, que ocuparon vacantes de alta y baja cualificación en el mercado de trabajo y que contribuyeron al crecimiento económico y la innovación en los países de acogida.
Un niño refugiado tiene cinco veces más posibilidades de no pisar la escuela
Sin embargo, una cuestión fundamental es que los niños que han tenido que huir a la fuerza de sus hogares ven limitado su acceso a servicios como la educación, siendo este uno de los principales factores por los cuales muchos niños y familias se ven obligados a migrar. Un niño refugiado tiene cinco veces más probabilidades de no asistir a la escuela que un niño no refugiado. Cuando pueden acudir a la escuela, los niños migrantes y refugiados suelen ser víctimas de discriminación, entre otras razones por un trato injusto y por acoso.
Fuera del aula, los obstáculos legales impiden que los niños refugiados y migrantes reciban servicios en igualdad de condiciones que los niños que son nativos de un país. En el peor de los casos, la xenofobia puede llegar a convertirse en ataques. Sólo en Alemania, las autoridades registraron 850 ataques contra los albergues de refugiados en 2015.
“¿Qué precio tendremos todos que pagar si no conseguimos proporcionar a estos jóvenes oportunidades para recibir una educación y disfrutar de una infancia más normal? ¿Cómo podrán contribuir de manera positiva a sus sociedades? Si no pueden, no sólo se pondrá en peligro su futuro, sino que también sus sociedades saldrán perdiendo”, dijo Lake.
Propuesta de acciones urgentes para proteger a niños desplazados, refugiados y migrantes
El informe señala seis acciones específicas para proteger y ayudar a los niños desplazados, refugiados y migrantes:
El bonito discurso del litio contrasta con su dura realidadHasta ahora no hay un solo contrato validado por el legislativo. Tampoco hay una normativa definida y el 2025 como año del litio está descartado |
Franklin Aro, el lustrabotas que brilla en el cineEl joven vio reflejada su vida en la filmación boliviana-chilena. La trama muestra la realidad de a quienes les toca vivir sin hogar. Conozcamos al protagonista de la película. |