25 de enero (ABI)- Por escrito y ante el Juzgado 13 de Sentencia Penal Anticorrupción y Contra la Violencia Hacia la Mujer de la ciudad de La Paz, Evo Morales se retractó de la acusación que hizo en contra del ministro de Justicia, César Siles, en sentido de que habría pedido dinero a militares implicados en el fallido golpe de Estado del 26 de junio de 2024.
A través de su cuenta en X, Siles informó que, “en el marco de la cultura de paz y el respeto a la verdad, recibí la retractación del Sr. Juan Evo Morales Ayma, reafirmando que la justicia y la ética en el ejercicio político deben prevalecer sobre la difamación, calumnia y el agravio infundado”.
Adjuntó en su publicación parte del memorial de retractación y disculpas firmado por Morales y su abogado Nelson Cox.
“Mediante el presente memorial es que me retracto de forma completamente voluntaria y sin que medie ningún tipo de interés alguno más que el de resolver el presente conflicto, ofreciendo mis disculpas al mencionado querellado y acusador particular aclarando que las palabras que he vertido se han emitido sin intención de mellar su honor y dignidad”, refiere Morales en el escrito.
El 26 de julio de 2024, durante una visita a la ciudad de El Alto, Morales acusó a Siles, por entonces Procurador General del Estado, de pedir $us 40.000 a 10 militares implicados en el golpe de Estado fallido que encabezó el excomandante del Ejército, Juan José Zúñiga, el 26 de junio.
"La familia de un militar detenido me informó y traté de cruzar información con un juez, el procurador del Estado Plurinacional, César Siles, ha sacado 40 mil dólares para liberar a cada soldado detenido, que se investigue. Son más de 10 militares que ha prometido liberarlos y sacado 40 mil dólares", denunció en ese entonces.
Por entonces, Siles anunció que, de forma particular, iniciará un proceso contra Morales por los delitos de calumnia, difamación e injuria.
Ante la decisión de Morales de retractarse de sus acusaciones, Siles expresó su confianza “en el sistema de administración de justicia y en el compromiso expresado de no incurrir nuevamente en acusaciones infundadas sobre injuria, calumnia y difamación contra las personas, en este caso, sobre mi persona, como ciudadano común, no autoridad”.
“La democracia boliviana se fortalece con el debate basado en los hechos demostrados y no en la desinformación o la manipulación”, enfatizó.
Desde noviembre de 2024, Morales se atrinchera en el Chapare de Cochabamba para impedir su aprehensión por el delito de trata de personas debido a la relación que mantuvo con una adolescente de 15 años, con quien procreó una hija mientras ejercía funciones como presidente del Estado, según la denuncia fiscal.
Por no presentarse a declarar en este caso, el 17 de enero, el juez de Instrucción Penal, Anticorrupción y Contra la Violencia hacia la Mujeres Quinto de Tarija, Nelson Alberto Rocabado, declaró a Morales en rebeldía, ordenó su búsqueda y aprehensión, congelar sus cuentas bancarias y la anotación preventiva de sus bienes.