Madrid, 25 de enero (La Información).- En un fútbol en el que los millones mandan y en cada mercado de fichajes se superan los fichajes galácticos, hay un club de la élite europea que rompe con la moda apostando por jóvenes promesas, futbolistas desconocidos que apuntan maneras, pero que no son una garantía.
El Borussia Dortmund se ha posicionado con este método como uno de los clubes referentes para los jóvenes, haciendo esta última semana que el 'Ibrahimovic negro', Alexander Isak, dejase de lado al Real Madrid para fichar por el Dortmund. Isak tan solo es el último de una larga lista.
La decisión de apostar por los jóvenes no tiene que ver con el futuro, sino con el presente. Esta misma temporada, el Dortmund realizó nueve fichajes, de los cuales cinco no superan los 22 años, y de los nueve ninguno es mayor de 25 (la plantilla de este año tiene 24,76 años de media).
Los cinco más jóvenes son Ousmane Dembélé (19 años, 15 millones pagados al Rennes), Raphael Guerreiro (22 años, 12 millones al Lorient), Emre Mor (18 años, 9,75 millones al Nordsjaellan), Mikel Merino (20 años, 3,75 millones a Osasuna) y Alexander Isak (17 años, 8,60 millones al AIK Solna).
Dembélé había sido pretendido por los grandes de Europa, incluidos Real Madrid y Barcelona, pero prefirió recalar en el equipo de Tuchel donde es amo y señor de una de las bandas con su velocidad y regates. Guerreiro, que se destaparía como una de las revelaciones de la Eurocopa, fue cerrado tras el primer partido del torneo por la dirección deportiva del club alemán.
Por su parte, Emre Mor era un completo desconocido en el fútbol europeo, pero se ha destapado en Alemania como uno de los jugadores con mayor talento en el viejo continente.
Fichajes que no le valen al Dortmund para competir de tú a tú contra el todopoderoso Bayern, pero que hacen del Signal Iduna Park el destino predilecto de toda estrella emergente en el fútbol, y todo eso gracias a dos personas.
Futbolista del Dortmund entre 1981 y 1998, Michael Zorc pasó a ser director deportivo y basó el club en la búsqueda de jóvenes promesas.
En 2009 se unió a su objetivo Sven Mislintat, ojeador del club desde 2007 que dos años más tarde ascendió al cargo de jefe de ojeadores, y que junto a Zorc se ha especializado en encontrar potencial en los jóvenes.
Gracias a esta dupla fueron llegando al club futbolistas como Lewandowski, Kagawa o Hummels, desconocidos en un primer momento, que se convirtieron en estrellas: