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Foto: Edgar Barahona

7 de enero (Urgente.bo).- El desastre ambiental que se registró entre fines de julio y principios de octubre en la Chiquitania y Amazonia boliviana dejo severos daños en la flora y fauna. La información sobre la afectación por los incendios aún es imprecisa, por lo que las autoridades de los diferentes niveles del Estado aún no adoptaron medidas, pero quien sí se ha puesto manos a la obra es la propia naturaleza.

En su momento, el gobierno de Evo Morales reportó que en Santa Cruz 3.614.038 hectáreas de bosques y pastizales fueron afectadas por los incendios. Mientras que el Viceministerio de Medio Ambiente, Biodiversidad, Cambios Climáticos y de Gestión y Desarrollo Forestal cuantificó las áreas quemadas en 5.268.000 hectáreas. 

Tras el desastre ambiental, aun no se lleva adelante un plan post incendio. Sin embargo, la naturaleza siempre encuentra el camino y termina sorprendiendo.

La Chiquitania empezó a recuperar la vida natural, las lluvias que cayeron en los últimos meses permitieron que los animales nativos de la región retornen a su habitad y que la flora retoñe.  

Edgar Barahona, director de Radio San José, explicó que en un principio, los caminos se encontraban sin vida, ya que toda la vegetación fue devorada por los incendios.

“Lo que se veía, eran animalitos muertos, entonces en vista de eso, nosotros hemos tenido la iniciativa como radio San José de ir a colocar bebederos,  después que pasaran los incendios, hemos colocado  en Santa Teresita y otros lugares. Después de tres meses cambiándoles el agua y abasteciendo de comida a nuestros animalitos silvestres, hemos iniciado la clausura de los bebederos y comederos que instalamos en la Chiquitania. Semanas atrás nos hemos trasladado hasta los bebederos y nos hemos encontrado con la sorpresa gigantesca de que la Chiquitania está en proceso de recuperación”, sostuvo Barahona.

Si bien llevará mucho tiempo para que la Chiquitania se recupere por completo, Barahona asegura que las lluvias trajeron esperanza para las comunidades que se vieron afectadas por los incendios. 

“Los arboles han crecido, vimos una gran cantidad de lagartijas, conejos, venados; una gran cantidad de animales debido a que ya la vegetación ha crecido y han retornado nuevamente a su habitad. Aquí en el pueblo hemos estado recibiendo muy poca lluvia pero en la parte donde se dio el incendio llueve seguido, la última vez que fuimos ya había barro. La tierra mojada, la arena mojada, hay muchas probabilidades que siga lloviendo. Este año por los incendios la lluvia ha sido mucho menor, entonces los atajados (pequeños estanques excavados en tierra para almacenar agua) no se han llenado ni siquiera a la mitad”, indicó el director de Radio San José.

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Foto: Edgar Barahona

Necesidades urgentes 

De acuerdo con Edgar Barahona, es necesario armar un equipo de guardabosques, que sea dependiente del Estado, para reaccionar oportunamente ante cualquier incendio y evitar un desastre natural como el que ocurrió meses atrás.

“Como región chiquitana lo que necesitaríamos es armar un equipo de guardabosque que tengan cisternas, GPS, drones y demás. Armar un punto de observación del medio ambiente desde la región chiquitana. Una de las exigencias que tenemos es que cuando los incendios empezaron, solo se tenía los reportes de los medios de comunicación locales. Entonces, la petición que le haría a la presidenta interina Jeanine Añez es crear un instituto de conservación forestal con gente de Robore, San Ignacio y demás sectores”, indicó Barahona.

Para el director de radio San José es necesario prepararse para enfrentar este tipo de emergencias que pueden afectar, nuevamente, la flora y fauna de la Chiquitania. Asimismo, es imperioso ejercer un control sobre los chaqueos. Pidió a las autoridades hacer cumplir las normas y castigar con todo el peso de la ley a quienes las incumplan. 

“También se tiene la noticia de que el gobierno iba a abrir una escuela de bomberos para capacitar y así proteger de cualquier incendio la región chiquitana.  Las dificultades que atravesamos cuando ocurrió la tragedia, era que no teníamos la gente capacitada, no teníamos equipo. Ahora que tengamos una escuela ya se va a poder saber cómo hacerle frente de manera inmediata a cualquier siniestro que se pueda venir en la Chiquitania”, subrayó.

Se espera que se inicie el plan postincendio que permita recuperar la Chiquitania y evitar más incendios en Bolivia.

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Foto: Edgar Barahona

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