En respuesta a la devastadora situación causada por los incendios forestales que continúan arrasando el departamento de Santa Cruz, la Corporación de Aquino Bolivia, en colaboración con la Universidad UDABOL y el Hospital Universitario Martín Dockweiler, ha desplegado una serie de iniciativas para apoyar a las comunidades afectadas. Estas acciones incluyen la organización de brigadas médicas y la entrega de importantes donaciones en efectivo, medicamentos, vituallas y equipamiento médico de última tecnología.
El presidente de la Corporación de Aquino Bolivia UDABOL, Dr. Martín Dockweiler Cárdenas, manifestó su profunda preocupación y compromiso con la situación: "Estamos viviendo una tragedia sin precedentes. No podemos permanecer indiferentes mientras miles de personas sufren los estragos de estos incendios. Es imperativo que actuemos ahora para abrogar las leyes incendiarias y prohibir los chaqueos, evitando así futuros desastres que ponen en riesgo la vida y el bienestar de nuestra gente. La pérdida de vidas humanas, como la del niño que falleció recientemente a causa de los incendios, es inaceptable y nos impulsa a redoblar nuestros esfuerzos".
Las brigadas solidarias están conformadas por más de 500 médicos y estudiantes de diversas áreas de la salud, quienes se han unido voluntariamente para brindar atención médica de emergencia y apoyo psicológico a las comunidades más afectadas. Estas brigadas se están desplazando a los 14 municipios más impactados, llevando consigo no solo su experiencia y dedicación, sino también varias toneladas de medicamentos, vituallas y equipamiento médico de última tecnología. Este equipamiento permitirá ofrecer atención médica de calidad en zonas donde los recursos son limitados.
Además del despliegue de las brigadas médicas, la Fundación Martín Dockweiler ha realizado una donación significativa de 140.000 bolivianos. Este monto será distribuido entre las alcaldías de los municipios afectados, facilitando así la adquisición de suministros esenciales y apoyando las labores de mitigación y reconstrucción.
"Este es un esfuerzo conjunto que refleja la solidaridad y el compromiso de nuestra institución y de todos los voluntarios que se han sumado a esta causa noble", agregó el Dr. Dockweiler. "Hacemos un llamado a la comunidad, a las empresas privadas y a otras instituciones educativas para que se unan a nuestra campaña de apoyo. Solo a través de la colaboración podremos superar esta crisis y brindar el alivio que tanto necesitan las poblaciones afectadas. Esta brigada es solo el inicio de un esfuerzo continuo y sostenido en el tiempo".
La situación en Santa Cruz continúa siendo alarmante, con 74 incendios activos y miles de afectados. Más de 4 millones de hectáreas han sido consumidas por el fuego, superando ampliamente las cifras de años anteriores. La densa humareda ha deteriorado significativamente la calidad del aire, afectando la salud de la población y obligando a muchas familias a abandonar sus hogares.
Las brigadas médicas y los voluntarios seguirán desplegándose en las zonas afectadas, proporcionando asistencia médica, distribuyendo suministros esenciales y ofreciendo apoyo emocional a quienes han perdido sus hogares y medios de vida. Se ha establecido un centro de coordinación para asegurar que la ayuda llegue de manera efectiva y oportuna a las comunidades más necesitadas.
Se invita a los alcaldes, líderes comunitarios y a los medios de comunicación a acompañar a los brigadistas en su partida hacia las zonas afectadas. Su presencia es fundamental para visibilizar el esfuerzo solidario, fomentar la participación ciudadana y reforzar el llamado a la acción comunitaria. Asimismo, se destaca la necesidad urgente de implementar cambios legislativos que prevengan futuros desastres de esta magnitud.
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