La Paz, 27 de marzo (La Información).- El informe de Oxfam Intermón habla de los negocios de las 20 principales entidades bancarias europeas en paraísos fiscales, pero ¿qué es un paraíso fiscal? Los paraísos fiscales son jurisdicciones o territorios que han adoptado intencionadamente unos marcos fiscales y legales que permiten a los no residentes (personas físicas o jurídicas) minimizar la cantidad de impuestos que deben pagar allí donde realizan una actividad económica sustancial.
Los paraísos fiscales tienden a especializarse y, aunque la mayoría de ellos no cumplen todas, generalmente responden a varias de las siguientes características gracias a una combinación de servicios:
• Ofrecen ventajas fiscales sólo a individuos o entidades no residentes, sin exigirles que una parte de la actividad económica se desarrolle en el país o en sus dependencias.
• Ofrecen unos niveles de tributación efectiva más bajos, incluso nulos, para individuos y entidades jurídicas.
• Han adoptado normas o prácticas administrativas que les permite evitar el intercambio automático de información en materia fiscal con otros Gobiernos.
• Han adoptado marcos legislativos o administrativos que permite mantener el secreto sobre la estructura corporativa de entidades jurídicas (incluidos fideicomisos, organizaciones benéficas, fundaciones, etc.) y sobre la propiedad de los activos.
Los 15 paraísos fiscales más agresivos para la ONG
Para Oxfam Intermón éstos son los 15 paraísos fiscales más agresivos y la explicación que da la ONG en alguno de los casos más sorprendentes:
1/ Islas Bermudas
2/Islas Caimán
3/Países Bajos: Los Países Bajos es el paraíso fiscal más agresivo de Europa, y el tercero de nuestra lista mundial. Su tipo nominal del impuesto de sociedades del 25% suele utilizarse como argumento para disimular su papel como paraíso fiscal para empresas. Sin embargo, recibe la puntuación más alta en lo que a incentivos fiscales para las empresas se refiere, y las empresas multinacionales trasladan a los Países Bajos enormes cantidades de beneficios para reducir su contribución. Una empresa australiana utilizó una compañía fantasma en los Países Bajos para eludir el pago de hasta 27,5 millones de dólares de impuestos en Malawi, uno de los países más pobres del mundo. Con esta cantidad se podría haber financiado el sueldo de hasta 10.000 enfermeras.
4/Suiza: Suiza, uno de los paraísos fiscales más antiguos del mundo, ha sido durante mucho tiempo un destino privilegiado para los ricos y poderosos deseosos de ocultar su riqueza al fisco. También es uno de los destinos preferidos de las empresas que tratan de reducir al mínimo su factura fiscal
La legislación fiscal del país tiene tantos agujeros como sus quesos, aupando al país alpino al cuarto puesto de nuestra lista de paraísos fiscales para las grandes empresas. En respuesta a las medidas internacionales que se están aplicando para combatir la evasión y elusión fiscal, Suiza irá eliminando gradualmente la legislación fiscal que actualmente favorece a las empresas extranjeras hasta su completa derogación en 2019. ¿Una buena noticia? No demasiado, si tenemos en cuenta que “para evitar un éxodo de empresas” (en palabras del Departamento Federal de Finanzas suizo) esta legislación se sustituirá por un tipo impositivo general mucho más bajo y otra batería de incentivos fiscales.
5/Singapur
6/Irlanda: Irlanda es un país conocido por sus bonitos paisajes, la amabilidad de sus gentes y sus magníficos narradores, pero también por el llamado “doble irlandés”, un vacío en la legislación fiscal que permite a las empresas extranjeras trasladar sus beneficios a otros paraísos fiscales a través de una filial en Irlanda. A pesar de las presiones para que el país ponga fin a esta práctica, el doble irlandés seguirá aplicándose hasta 2020, fecha en la que el Gobierno tiene previsto introducir nuevos incentivos fiscales que también pueden dar pie a que se cometan otros abusos.
La reciente resolución de la Unión Europea en la que se reveló que el laxo sistema legal irlandés había permitido a Apple eludir impuestos por valor de 13.000 millones de dólares da muestra de la magnitud de la elusión fiscal facilitada por el sistema irlandés. El hecho de que tantas multinacionales transfieran sus beneficios a la Isla Esmeralda muestra que es un destino atractivo no sólo para unas cuantas “manzanas podridas”.
7/Luxemburgo: El diminuto Estado de Luxemburgo, situado entre Alemania, Francia y Bélgica, estuvo en el ojo del huracán por el escándalo de los ‘LuxLeaks’ en 2014, que sacó a la luz cómo los acuerdos fiscales con las autoridades luxemburguesas permitieron evadir impuestos a más de 300 empresas multinacionales. A pesar de que el escándalo obligó a Luxemburgo a compartir información sobre dichos acuerdos con otros gobiernos, el país anunció hace poco una nueva concesión a las empresas, comprometiéndose a reducir su impuesto de sociedades hasta el 18% en 2018.
8/Curaçao
9/Hong Kong
10/Chipre: Hoy, las multinacionales caen rendidas ante los encantos de esta isla del Mediterráneo oriental gracias a un régimen fiscal que las atrae como un afrodisíaco. El impuesto de sociedades en Chipre es del 12,5%, uno de los más bajos de Europa. Además, la isla ofrece una gama de incentivos fiscales a las grandes empresas que la visitan.
11/Bahamas
12/Jersey
13/Barbados
14/Isla Mauricio
15/Islas Vírgenes