El Alto, 05 de marzo (Urgentebo.com).- Wilma Alanoca Mamani es Ministra de Culturas y Turismo desde el 23 de enero reciente. Tuvo que dejar la concejalía municipal para integrar el gabinete del presidente Evo Morales. Ella vive en El Alto y es representante de los alteños en el equipo de colaboradores más importantes del Primer Mandatario. Alanoca reivindica las medidas que el gobierno puso en marcha a favor de El Alto y dice que los jóvenes, que constituyen la porción mayoritaria de la población alteña, deben hacerse de la oportunidad que genera el proceso de cambio, que se traduce en diferentes obras, proyectos y objetivos.
¿Cuál es la importancia de El Alto para Bolivia?
Los cambios que hubo en el país en los últimos 11 años han sido gracias a la lucha de El Alto, por el liderazgo de la gente. La principal fortaleza de El Alto es su gente y de hecho yo pertenezco a esa generación que pasa del siglo XX al siglo XXI. El 2003 es resultado de la resistencia social, que estalló por la demanda de una mejor calidad de vida y de progresoContra la exclusión social, económica y política; desde El Alto surgió la voz de la dignidad contra la exportación del gas. El Alto refleja a los bolivianos y su lucha por mejor vida. La mujer alteña refleja a la mujer boliviana, trabajadora, luchadora y corajuda, la que se encarga del sustento del hogar. Antes del 2003 nos avergonzábamos de nuestro color y de nuestras raíces. Ahora nos aceptamos.
¿Cuál debería ser el papel del joven alteño en este proceso?
Más del 50 por ciento de la población son jóvenes. Estamos hablando de mujeres y hombres de 17 a 25 años. Es la mayor población que tenemos. Tenemos una demanda muy grande de nuevas oportunidades. Los jóvenes quieren mejor empleo, quieren más espacio para la cultura. El joven alteño es más progresista, más exigente. Antes, el alteño quería una avenida enlosetada, ahora quiere una con pavimento rígido. Antes tenía una casa mediana, ahora quiere un edificio. Es exigente y hay que aprovechar aquello para generar nuevos liderazgos, pero con contenido. Que esos jóvenes con contenido aprovechen las oportunidades del proceso de cambio. Con la Agenda 2025, el proceso de cambio va universalizar los servicios básicos, al igual que las políticas de salud y educación. En ese sentido, necesitamos el acompañamiento de las nuevas generaciones. Necesitamos más científicos para el centro de investigación Nuclear; más especialistas para el satélite Túpac Katari, para la ensambladora Kupis, para la ensambladora de tubería PVC. Estamos planteando a nuestros jóvenes que se especialicen mucho más. Y desde el enfoque cultura también se requiere más. En la UMSA se han titulado apenas 70 arqueológos y si pensamos solo en Tiwanacu, hay muchas oportunidades. Como autoridades, debemos darles mejores condiciones y capacidades para que manejen las empresas estatales para que estén listos para un mejor futuro.
¿Qué se hace para El Alto?
Es un tema más estructural, es más grande que entregar por entregar. En El Alto en lo que más se invirtió es en servicios básicos. La mayor inversión que se hizo fue en alcantarillado, agua potable y gas a domicilio. No olvidemos que tenemos el proyecto multipropósito que va a garantizar por 30 o 40 años el servicio de agua. Antes hubo un desorden. La ciudad creció sin planificación, pues para poner gas a domicilio tenemos que levantar el pavimento o el asfalto, lo mismo ocurre con el alcantarillado. Nos ha faltado planificación urbanística, pero hemos mejorado el acceso a los servicios.
¿Cuál es el norte que propone el gobierno?
Ahora si hablamos en grande, la virtud de El Alto, siempre han sido las empresas unifamiliares. El Alto siempre ha tenido un espíritu productivo. Por eso las nuevas generaciones están buscando una mejor formación. Por eso apostamos por la construcción de centros tecnológicos. Son infraestructuras, en las que queremos utilizar la currícula de la Ley Avelino Siñani y Elizardo Pérez, eso significa que ya no salen solo como bachilleres, sino con oficios en electrónica, en panadería. Estamos empujando a tener generaciones preparadas. Eso es hablar con seriedad en la educación.
En lo que quiero aterrizar es que queremos hacer tres cosas: servicios básicos, a nadie tiene que faltarle ninguno de los servicios. Queremos una ciudad inclusiva. Queremos jóvenes con buena formación. Y queremos acompañarlos con la cultura, porque si tenemos buenos profesionales, pero no se aman ni aprecian su identidad, son incompletos. Y la cultura será ese eje articulador, la cultura será una herramienta de la formación un ser humano integral. No se trata de decir cuánto invierto. Tenemos que explicar el trasfondo de nuestras obras. Ahí está el Teleférico Azul, que va a cambiar la vida. En resumen, que la Alcaldía se encargue de ordenar la ciudad, nosotros nos encargaremos de los proyectos macro.