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Vecinos del distrito 9 de la ciudad de El Alto, encontraron cueros de perros, temen que la carne haya sido comercializada.
La Paz, 16 de noviembre (Urgentebo) .- Vecinos del distrito 9 de la ciudad de El Alto, encontraron cueros de perros, temen que la carne haya sido comercializada, debido a ello la activista en favor de los animales, Susana Del Carpio, informó que en Bolivia no existe una ley que prohíba la comercialización de carne de perro y gato.
“A nosotros nos llegan denuncias, una cada seis meses que nos dicen 'parece que esta señora está comercializando con carne de perro, porque mete a canes y no salen', pero en Bolivia mientras no exista una normativa que regule el consumo de esta carne, no se puede hacer nada”, dijo Susana Del Carpio.
Expresó que si es una persona pobre, indigente indica que consume estos animales porque no tiene dinero, y por eso no entrará a la cárcel, "se debe investigar y es así que detectamos que hay vacíos en la ley Nº 700 para la Defensa de los Animales contra Actos de Crueldad y Maltrato, que tiene por objeto establecer el marco normativo específico para la defensa de las otras especies contra actos de violencia, crueldad y maltrato cometidos por personas naturales o jurídicas".
Este medio intentó comunicarse con el intendente de El Alto, Israel Marca y dijo que hasta el momento se está investigando si esta carne es perro o de vaca.
Los perros y los gatos son considerados como símbolos de mascotas en la mayoría del mundo. Las personas de América, y de todo el Occidente, los adoptan y/o los crían y son representados como fieles compañía para la familia, amigos de los niños, quienes brindan amor a los dueños y protección en la casa.
Sin embargo, en otras partes del mundo, como en Corea de Sur y en China utilizan a estos animales para matarlos y comerlos. Existen mercados donde se comercializa la carne de perros y gatos; algunos los crían y luego los venden a un precio bastante elevado; también, recogen de la calle los perros abandonados o incluso capturan los perros de sus propios dueños.
Estos animales permanecen en jaulas, amontonados, se los dejan sin comer, ni beber por días para que mueran lentamente; otra técnica es matarlos dentro de una bolsa, o cortarles el cuello con un cuchillo. Las pieles pueden ser vendidas también, a empresas peleteras o a dueños de comercio de ropas, a veces se engaña al consumidor diciendo que la piel es de zorro u otro animal, en vez de un perro de raza, como el caso del ovejero alemán.
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