28 de marzo (El Mundo).- El dramático recuento de cifras que arroja a diario el coronavirus en España sigue siendo ascendente, tanto en número de casos como de fallecidos. Según los datos oficiales del Ministerio de Sanidad, España contabiliza hoy un total de 72.248 positivos confirmados, un 13% más que los registrados ayer, y los fallecidos ascienden ya a 5.690, frente a los 4.858 del viernes: si ayer el incremento de muertos con respecto al día anterior era de 769, hoy los datos oficiales hablan de un aumento de 832, la cifra más alta de fallecimientos en 24 horas desde que comenzó la pandemia. En un solo día ha habido en España casi tantos muertos por Covid-19 como fallecidos en todo 2019 por accidentes de tráfico (1.098).
El número de fallecidos por Covid-19 se ha multiplicado por 162 en menos de tres semanas, mientras que el número de altas lo ha hecho por 334 y el de infectados por 53,2. Es la cara y la cruz de la pandemia de coronavirus que azota España.
La buena noticia hay que buscarla en el número de pacientes curados, que hoy asciende a 12.285, frente a los 9.357 contabilizados ayer. Según las cifras ministeriales, el pasado 9 de marzo se habían dado 28 altas, de forma que en menos de 19 días se han acumulado 12.257, a un ritmo de 645 curados cada día.
A tenor de estos datos, Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, ha declarado que "la enfermedad se está estabilizando, en algunas zonas del país está llegando al pico de la curva que tanto nos preocupa, e incluso algunas autonomías parece que están superando ese pico, pero hay que ser muy cauto porque estos datos son provisionales".
Aun así, Simón ha admitido que lo verdaderamente preocupante es el nivel de saturación al que llegarán en los próximos días las unidades de cuidados intensivos (UCI). Según el responsable ministerial, esa saturación "se ha alcanzado ya en dos comunidades y está a punto de alcanzarse en otras".
Los pacientes que se infecten hoy "tendrán necesidad de una cama de UCI en siete o 10 días -ha puntualizado Simón-, lo que implica que la saturación de estas unidades llegará a finales de la semana que viene o principios de la siguiente". Por esta razón, hay que intentar reducir al máximo la presión sobre ellas, "porque son las que más van a contribuir a la reducción de la letalidad".