26 de febrero (CNN).- El papa Francisco pasó otra “noche tranquila” en el hospital, informó el Vaticano la mañana del miércoles.
“El papa tuvo una noche tranquila y está descansando”, dijo el Vaticano en su último boletín sobre la salud del pontífice de 88 años.
Más tarde, una fuente del Vaticano dijo que está “sentado en un sillón hoy y continúa con su tratamiento”, recibiendo el mismo flujo de oxígeno que en los últimos días.
El lunes, el Vaticano había informado que “las condiciones clínicas del Santo Padre, aunque críticas, muestran una ligera mejoría”, agregando que en la jornada no había sufrido episodios de crisis asmáticas respiratorias y que algunos análisis de laboratorio han mejorado.
El Vaticano añadió que los problemas renales leves de Francisco, anunciados por primera vez el domingo, “no causan preocupación” y que su oxigenoterapia continúa “con flujos y porcentaje de oxígeno ligeramente reducidos.”
“Los médicos, considerando la complejidad del cuadro clínico, prudentemente no dan a conocer todavía el pronóstico”, dijo el Vaticano el lunes sobre el pontífice de 88 años que ha estado luchando contra la neumonía en sus dos pulmones.
El lunes por la mañana, Francisco recibió la Eucaristía y reanudó su trabajo por la tarde, informó el Vaticano. Por la noche, llamó al párroco de la parroquia de Gaza, con quien ha estado en contacto frecuente desde que Israel lanzó su asedio al enclave tras los atentados del 7 de octubre dirigidos por Hamas.
El papa ingresó por primera vez en una clínica de Roma hace 10 días, para someterse a pruebas por una infección de las vías respiratorias. Posteriormente se le diagnosticó una neumonía.
Líderes religiosos y fieles de todo el mundo se han reunido para rezar por el líder argentino, cuya agenda se ha despejado en gran medida debido a su intenso tratamiento médico.
La gente se reunió el lunes en la Plaza Constitución de Buenos Aires, donde Francisco celebró una misa cuando era arzobispo, para rezar por su salud. Algunos lloraban o sostenían fotos del pontífice.
La prima del papa, Carla Rabezzana, de 93 años, que vive en el municipio de Portacomaro, en la provincia italiana de Asti (noroeste), dijo que la familia está preocupada por su salud.
“Todos estamos muy preocupados. Esperamos que se recupere pronto y supere este mal momento. Sigo todo por las noticias, estoy muy agitada”, declaró el lunes al canal público italiano RAI.
Durante la misa del domingo en Manhattan, el arzobispo de Nueva York, el cardenal Timothy Dolan, dijo que Francisco está “muy, muy frágil de salud y probablemente cerca de la muerte”.
A primera hora del lunes, Francisco estaba “despierto” y “de buen humor” después de que la “noche pasara bien”, dijo el Vaticano. Durante el fin de semana, recibió altos flujos de oxígeno para ayudar a aliviar su crisis respiratoria. El domingo no pronunció la oración semanal del Ángelus, por tercera vez en sus casi 12 años de papado.
El estado del papa parecía mejor a principios de la semana pasada, y el Vaticano lo describió como respondiendo “positivamente” al tratamiento médico el jueves.
