17 de febrero (Urgente.bo).- La justicia determinó la detención preventiva, por cinco meses en la cárcel de San Pedro, del joven de 20 años que confesó el asesinato de Francisco Marupa, defensor y líder indígena del pueblo Leco. La medida se tomó mientras avanza la investigación por el delito de homicidio.
“El equipo multidisciplinario intervino en la audiencia de consideración de medidas cautelares, en la que la autoridad jurisdiccional, mediante resolución fundamentada, determinó la existencia de suficientes elementos de convicción que señalan a Julio Lero Tayo como autor del delito de homicidio, disponiendo su detención preventiva por cinco meses en el recinto penitenciario de San Pedro de la ciudad de La Paz”, dice el comunicado del Ministerio de Justicia.
Hace días, comunarios de Torewa, perteneciente a la Central Indígena del Pueblo Leco de Apolo (CPILAP), denunciaron ante la Policía Boliviana el fallecimiento de Marupa, reconocido defensor de las tierras de origen frente a grupos ilegales dedicados al tráfico de tierras para la minería ilegal, la caza y otras actividades ilícitas.
Los comunarios sostienen que su muerte estaría relacionada con conflictos por la minería ilegal. Sin embargo, el Ministerio de Gobierno descartó esta versión y señaló que el crimen fue motivado por rencillas personales.
La Policía aprehendió a un joven de 20 años, quien confesó que tenía problemas con Marupa, ya que el dirigente indígena lo había sorprendido en dos ocasiones robando en sus sembradíos y domicilio. Según esta versión, el presunto homicida causó la muerte del líder indígena de 67 años después de que este último lo volviera a sorprender robando y lo amenazara para que no regresara, informó el coronel Walter Sossa, director de la FELCC.