11 de junio (Urgente.bo).- Chato, el perro de raza husky, ya tiene familia. Cuatro personas solicitaron la adopción del can y todas ellas cumplieron los requisitos exigidos, pero uno ganó la custodia en una especie de sorteo.
La Policía Forestal y de Medio Ambiente (Pofoma) realizó la entrega de Chato a su nueva familia comprometida con su cuidado.
Historia de Chato
El 28 de abril, en las redes sociales se hizo viral un video donde se ve a un individuo maltratando y torturando a Chato, de aproximadamente ocho meses.
El hecho ocurrió en una casa de la ciudad de El Alto y fue grabado en video por un inquilino de la vivienda y por miedo a represiones no quiso revelar la dirección, pero al final se conoció la ubicación y Pofoma rescató al can.
En el material audiovisual se ve a un sujeto sumergiendo a un tacho con agua al perro, luego lo agarra de la cabeza y lo lanza hacia el piso y procede a agredirle. Activistas y animalistas se movilizaron y exigieron justicia para Chato.
Días después, el agresor de Chato fue sometido a audiencia de medidas cautelares y posteriormente sentenciado a tres años de cárcel. Según Amor por los animales Bolivia, organización que defiende los derechos de los animales, el agresor, pese a ser sentenciado, no fue recluido en un centro penitenciario.
Mientras tanto, el perrito era rehabilitado en el Centro de Adiestramiento de Canes de La Paz.
El 7 de junio, la institución informó que Chato ya fue rehabilitado y volverá a dependencias de Pofoma para esperar a su nueva familia, que ya llegó este viernes.
“Estoy superfeliz, es una nueva vida (para Chato) y para mi familia también. Estoy superfeliz, anoche no puede dormir”, expresó el padre de familia que acogerá al perrito.